El PNV ha rescatado hoy una reforma legislativa del cajón. Es la reforma de la ley del Tribunal Constitucional, que ya había planteado en anteriores legislaturas. Busca deshacer la modificación que hizo el gobierno de Mariano Rajoy el año 2015. Por una parte, derogar el recurso previo contra reformas estatutarias. Por otra parte, suprimir el carácter ejecutivo del tribunal que le permite actuar contra los cargos públicos que incumplan sus sentencias. Hoy ha sido debatida la toma en consideración, y tanto el PSOE como Unidas Podemos votarán a favor. Con matices, los socialistas quieren debatirlo y eventualmente enmendarlo en las ponencias.

Esta reforma ya se llegó a tramitar a finales del 2016, motivada por las reticencias de la entonces presidenta del Parlament, Carme Forcadell, a cumplir las resoluciones del Tribunal Constitucional. El PNV plantea una marcha atrás. El PP de Rajoy dio carácter ejecutivo a las sentencias del alto tribunal y le permitía actuar con un catálogo sancionador con multas de 3.000 a 30.000 euros e incluso la suspensión de las funciones de las autoridades y funcionarios desobedientes. En cambio, los nacionalistas vascos persiguen suprimir este carácter ejecutivo y que esta sanción sea mucho menor, con multas coercitivas que vayan de los 600 a los 3.000 euros", sin capacidad de suspender el cargo público. Solo este punto genera por ahora el consenso necesario.

Por otra parte, los jeltzales también buscan derogar el recurso previo de inconstitucionalidad para los Estatutos de autonomía, una reforma que también introdujo el PP en 2015, pero esta vez de la mano del PSOE. Los nacionalistas vascos denuncian que "permite a los responsables políticos hacer negación de su obligación de resolver mediante el diálogo y el consenso los problemas políticos de fondo".

Los socialistas se han puesto bien y la reforma legislativa al menos será tramitada. El diputado del PSOE Odón Elorza ha subrayado que sólo comparten el primer punto, el de las funciones ejecutivas del TC para sancionar, y ha asegurado en este sentido que el PP "se extralimitó". En cambio, ha rebatido las críticas del PNV al recurso previo de inconstitucionalidad, al que dio apoyo el PSOE hace seis años. Sigue pensando que es necesario para evitar "conflictos de legitimidades" como el que llevó la reforma del Estatut de Catalunya.