La alianza del PSOE y Unidas Podemos anunciada a bombo y platillo este martes al mediodía para un gobierno de coalición suma sólo -la curiosa cifra de- 155 diputados. Ergo, ahora tendrán que arremangarse para buscar a más sociosbuscar a más socios. Los socialistas han afirmado en las últimas horas que aspiran a no tener que contar con fuerzas independentistas, pero fuentes d'En Comú Podem adelantan a ElNacional.cat que confían en poder arrancar el apoyo, activo o pasivo, de ERC y el PNV. Asimismo, explican que harán lo que esté en sus "manos para conseguir el ok de los republicanos" y, en este sentido, ya habrían habido los primeros intentos de contacto.

Se da por hecho que a los 155 escaños de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias se añadirán los 3 de Más País de Íñigo Errejón. Al otro lado, los que, salvo alguna sorpresa mayúscula, se opondrán son el PP, VOX y la CUP, que acumulan 142 diputados. Si aquí se añadiera el no de Junts per Catalunya serían ya 150.

Volviendo al bloque del sí, sólo que el PNV -que en la votación de la investidura pasada se abstuvo- bastaría con que los de Oriol Junqueras optaran por una abstención, como ya hicieron hace unos meses, para no bloquear la formación de un gobierno progresista que entonces se hartaron de reclamar. Como ya pasó con el intento fallido de primavera, la posición de ERC podría ser consensuada con EH Bildu, que cuenta con 5 sillas. Con estos factores la ecuación se resolvería favorablemente aunque los 10 de Cs votaran en contra.

En la operación, socialistas y Podemos tienen la confianza de poder arrastrar a los partidos minoritarios del Congreso, como Coalición Canaria (2), el Partido Regionalista de Cantabria (1), el BNG (1) o Teruel Existe (1).