"La pregunta que nos tenemos que hacer es si queremos acabar el camino que empezamos el 1-O, por duro que sea, porque el tramo que queda para llegar hasta el final, no nos tenemos que engañar más, será dramático", ha advertido el conseller Toni Comín al tomar la palabra durante el acto de presentación del Consell per la República que se está celebrando este sábado en Bruselas.

Según el conseller, si el Estado —que ha tildado de siniestro y fundamentalista— fuera más normal, se podría conseguir la independencia desde las instituciones, pero se trata de un "Estado autoritario". "Solo podemos conseguir la independencia desde la movilización, la sociedad, desde la calle, con lucha no violenta, pero lucha, acción pacífica, pero acción", ha asegurado. Ha reclamado "coraje y unidad republicana".

Para Comín, el independentismo no conseguirá su objetivo si solo se plantea este debate como un pulso entre instituciones, pero sí lo conseguirá si es un pulso entre las instituciones españolas y la sociedad catalana, porque, "si se hace así, su represión tarde o temprano colapsará".

Según su opinión, en Europa ya han entendido que en Catalunya se vive un pulso entre autoritarismo y democracia, por lo que ha concluido: "Ha llegado la hora, no podemos esperar, ha llegado la hora de pagar el precio, alto, injusto, pero inevitable de nuestra libertad; solo si estamos dispuestos a pagar este precio seremos libres".