Por fin Carmen Calvo ha tenido que hacer frente a los gastos del rey emérito, que cuelgan de su ministerio a través de Patrimonio Nacional. Ha sido una petición reiterada del republicanismo de todo el Estado durante las últimas semanas. Ha tenido que ser durante la sesión de control en el Senado este martes, a pregunta de Junts per Catalunya. La vicepresidenta primera del Gobierno no sólo ha defendido que la fuga vaya a cargo de las arcas públicas, sino que ha dicho que estos gastos son "transparentes y públicos". Lejos de detenerse aquí, la dirigente socialista lo ha comparado con los fondos que prevé la Generalitat para sus expresidents.

En su pregunta, el senador de JxCat, Josep Lluís Cleries, ha preguntado si eran ciertas las informaciones publicadas sobre los gastos asumidos por Patrimonio Nacional. Ha citado el caso del personal que acompaña al "rey emérito huido", pero también las tres piscinas del rey Felipe VI, el alojamiento de la examante Corinna Larsen o la indemnización por despido de la tripulación del yate Fortuna.

Desde el Gobierno lo defienden. "El Ministerio de la Presidencia se limita a gestionar unos fondos que son transparentes y públicos, porque están en los presupuestos generales del Estado. Y tienen que ver con la asistencia al rey Juan Carlos I como exjefe del Estado", ha justificado Carmen Calvo. En este sentido, la dirigente socialista ha lanzado su comparativa: "¿Sabe a qué se parecen estos fondos? A los mismos que tienen los expresidentes de Catalunya en los presupuestos de Catalunya, algunos de ellos compañeros suyos de partido".

Durante su intervención en la sesión de control del Senado, el portavoz de JxCat en la cámara alta también ha acusado al Gobierno de haber hecho uso de toda la "maquinaria del Estado" para favorecer la victoria de Salvador Illa en las elecciones del 14-F, utilizando las encuestas del CIS pero también remando a favor de la suspensión del aplazamiento electoral.

Pero la vicepresidenta Carmen Calvo no se ha salido del guion de la pregunta en su réplica: "No sabía que venia a un acto de campaña de su partido. Si lo sé, no vengo". La dirigente socialista le ha replicado que "el progresismo es cumplir las normas, todas, y sólo modificarlas por los procedimientos que nos hemos dado todos".