El ministro español de Exteriores, Josep Borrell, ha admitido este martes que la imagen internacional del Estado español está "seriamente dañada sobre todo en Europa y el mundo anglosajón" por la "propaganda" del "movimiento independentista catalán con el apoyo activo de las instituciones de la Generalitat", hecho que ha obligado a su ministerio a "dedicar parte de su tiempo y energía a corregir este mensaje y recomponer nuestra imagen".

"Lo estamos haciendo, porque es parte de las obligaciones de un ministro de Exteriores enfrentarse a la imagen de su país en el mundo cuando está seriamente dañada," ha dicho, "pero estamos teniendo algún éxito, y los aseguro que el Estado no perderá este combate".

Como ejemplo ha afirmado que el secretario general del Consejo de Europa ha dado apoyo a la posición del gobierno español y la separación de poderes en el Estado. En todo caso ha afirmado que tendrá que seguir dedicando esfuerzos a este tema porque "para un país la amenaza de secesión de una parte importante de su territorio y su economía es algo que tiene que preocupar su política exterior".