La número dos de Junts per Catalunya en el Congreso, Laura Borràs, ha considerado este domingo que la cuenta atrás de la sentencia es un "goteo emocional absolutamente miserable" y ha avisado de que "no se puede jugar así con la vida de las personas".

Además, durante su visita a la Fira del Torró i la Xocolata a la Pedra d'Agramunt ha criticado las filtraciones sobre la sentencia del procés que ha habido estos últimos días a varios medios de comunicación. Ha remarcado que son "inadmisibles" y que "dicen muy poco de la salud democrática" del estado español.

Borràs también se ha mostrado confiada que, una vez se conozca el veredicto, el pueblo de Catalunya "volverá a salir a la calle" porque "también se siente juzgado". "Ellos querrían que fuera el punto y final, pero no hay punto y final que valga", ha explicado la dirigente de JxCat, que ha asegurado que la determinación del pueblo de Catalunya se mantiene "intacta" a pesar de los intentos de "doblarnos" e "intimidarnos".

"Sin absolución no puede haber solución"

En estos días de "tensión, nerviosismo y angustia creciente", Borràs también ha tenido un recuerdo especial para las familias de los presos que, en estos dos años, son los que "más han sufrido de manera silenciosa". En este sentido, ha remarcado que "sin absolución no puede haber solución" y que, incluso si la sentencia es absolutoria, a los presos y a sus familias no los podrían resarcir los dos años de prisión preventiva e injusta".

Borràs también ha vuelto a defender que el 1 de octubre de 2017 no hubo rebelión ni sedición sino un ejercicio de autodeterminación, "un derecho fundamental". Borràs critica que, desde entonces, en Catalunya sólo se ha vivido "represión, represión y represión" y la eliminación "sistemática" de derechos básicos fundamentales y de derechos humanos.