Isabel Díaz Ayuso no es de las que entierran el hacha de guerra. No lo ha hecho ni siquiera en un momento como el de hoy, en la despedida de Pablo Casado delante de la Junta Directiva Nacional del Partido Popular. A puerta cerrada, delante de las 450 personas reunidas, la presidenta madrileña ha pedido la palabra y ha denunciado cómo desde su propio partido la han atacado más a ella que al Gobierno de coalición. En público, en declaraciones a los periodistas, ha ido un paso más allá e incluso ha pedido "expulsar" del partido a todos aquellos que hayan participado de la "campaña" en contra suyo, sin decir nombres.

En la reunión de la Junta Directiva, además de Pablo Casado, podía intervenir quien pidiera la palabra. Lo han hecho pocos, pero Isabel Díaz Ayuso ha estado entre ellos. Quería poner el dedo en la llaga: "Ojalá se hubiera investigado con tanto detalle a Pedro Sánchez y otros gobiernos de la izquierda como se ha hecho con miembros del partido, a la Comunidad o a mi familia". Y ha remachado: "Los socialistas, sólo en el gobierno de Moncloa, dilapidaron más de 300 millones de euros en compras defectuosas de material sanitario. Por qué creéis que hay tantos dirigentes en otras regiones que no dicen nada de todo eso"?. La presidenta de la Comunidad de Madrid ha asegurado también que "lo que estaba pasando" al partido va mucho más allá de ella y que por eso hay "muchos afiliados y dirigentes agraviados por todo el país, a quien se ha negado la voz si no se dejaban controlar por el mando."

Lo mismo que ha denunciado en privado, lo ha denunciado en público. En una atención a los medios de comunicación a la salida de la Junta Directiva, la dirigente madrileña ha pedido investigar y "expulsar" del partido a todos aquellos que hayan formado parte de la "campaña" en contra de ella, porque "no cree en las heridas cerradas en falso". Cuando se le ha preguntado por nombres, ha echado balones fuera. Sea como sea, Ayuso ha considerado "insensato" que un partido pueda atacar de esta manera a sus dirigentes, cuando ella ha sido siempre "leal". Ha planteado una disyuntiva para los populares: ser "la alternativa a Sánchez" o, por el contrario, "destruirnos como organización".

Feijóo calienta en la banda 

Todos los barones del PP, e incluso el mismo Pablo Casado, ya le han señalado como futuro líder del partido, como la persona que tiene que coger las riendas después de la grave crisis. Pero el anuncio de candidatura por parte de Alberto Núñez Feijóo todavía se hace esperar. No será hasta mañana que anunciará qué hace. Antes quiere reunir a la Junta Directiva de los populares en Galicia, encuentro que tendrá lugar mañana a las cinco y media de la tarde, para escuchar a sus suyos compañeros en el territorio. El presidente de la Xunta también ha aprovechado para pedir que se presente todo aquel que lo considere, aunque todos los ojos hace días que sólo miran hacia él.

Después de la reunión de la Junta Directiva Estatal, este mediodía en Madrid, Núñez Feijóo ha explicado que ha pedido al secretario general del PP gallego que convoque para mañana por la tarde una reunión de la Junta Directiva a Santiago para ver "cómo podemos ayudar desde Galicia ante la situación del PP". Y después de escuchar a sus compañeros ha añadido, "me dirigiré al conjunto de los españoles para trasladarlos cuál es mi decisión". El presidente de la Xunta ha pedido respetar los procedimientos internos. Y también ha reclamado que, si algún compañero quiere presentarse, que lo haga; que "es su momento", que "no tenga miedo".