La Audiencia Nacional ha afirmado que el magistrado Manuel García-Castellón ha provocado un "caos procesal" en la causa de Tsunami Democràtic, pero que descarta admitir su recusación y apartarlo del caso tal como le pide uno de los investigados, Oleguer Serra, directivo de Òmnium y defendido por Mónica Tarradellas. ¿El motivo? Por un defecto formal: no haber completado correctamente los denominados "poderes especiales" por este trámite. Por eso, la sección 3.ª de la sala de lo penal de la Audiencia Nacional descarta analizar el fondo de la recusación sobre si el juez García-Castellón perdió su imparcialidad cuando en un debate público despreció la ley de amnistía. El empresario Oriol Soler, defendido por Benet Salellas, también recusó al titular del juzgado central de instrucción 6 de la Audiencia Nacional con la misma suerte. No se aceptó por haberlo presentado tarde en relación con las polémicas declaraciones del juez.

En la resolución, comunicada este lunes, el magistrado Alfonso Guevara, presidente y ponente del tribunal, es quien califica de "caos y descontrol procesal" la tramitación que el juez García-Castellón ha realizado de su recusación. Las defensas de Serra y Soler expusieron que el magistrado no podía resolver y denegar su recusación, como fija la ley, y la Audiencia Nacional expone que se puede hacer en casos "muy excepcionales". No obstante, el tribunal da la razón a Serra de que actuó correctamente. Serra se quiso personar en la causa de Tsunami al ver su nombre en artículos de prensa, en abril de 2023, y el juez se lo denegó. Finalmente, cuando García-Castellón lo incluyó en la lista de 12 investigados por terrorismo, con el presidente Carles Puigdemont, aceptó su personación, momento en que también presentó la recusación del juez. Para la Audiencia, la actuación del directivo de Òmnium es correcta, pero no admite la recusación por un defecto "insubsanable" y al mismo tiempo se indica que "no hay indefensión", porque ha podido presentar un recurso a la sala de lo penal.

Declaraciones del juez

El magistrado García-Castellón hizo las polémicas el 5 de octubre pasado, en una conferencia en el Foro Orense. Dijo: "Yo, únicamente como ciudadano, puedo decir dos cosas: una, que en la Constitución tampoco está prohibida la esclavitud y, no obstante, no es posible, y no está prohibida expresamente, y dos, bien, estos señores han dicho que cuándo puedan volverán a repetirlo, por lo tanto, ¿será esta amnistía la primera de muchas otras después"? Para las defensas, el juez mostraba una oposición abierta a la ley de amnistía del Procés, a la cual se podrían acoger si finalmente se aprueba.

 

Salvado por la Audiencia

No es la primera vez que el juez García-Castellón recibe el apoyo de sus compañeros. La Audiencia Nacional negó que el magistrado haya actuado políticamente en el caso Tsunami, ante el crítico recurso que en enero presentó la defensa de Josep Lluís Alay, que encabeza el abogado Gonzalo Boye, que acusó al juez de utilizar el caso Tsunami para atacar los acuerdos cerrados entre el PSOE y Junts para impulsar la ley de amnistía. La Audiencia aseguraba que son "absolutamente rechazables" las alegaciones formuladas sobre la existencia de "una pretendida motivación política" tras las últimas resoluciones del juez.

Habrá que ver si la Audiencia Nacional mantendrá este apoyo al juez García-Castellón ahora que tiene que analizar los recursos de la Fiscalía y las defensas, que descartan que en el caso Tsunami haya indicios del delito de terrorismo.