A pesar de ser un pleno para dar explicaciones sobre la gestión de la Covid-19, Pere Aragonès ha dedicado los minutos finales de su intervención como vicepresident en funciones de president para lanzar un mensaje bien claro a Junts: es urgente llegar a un acuerdo que desencalle su investidura y permita la formación del nuevo Govern de la Generalitat.

"Tenemos una mayoría como nunca habíamos tenido en el Parlament para impulsar la amnistía y la autodeterminación. Hace mucho tiempo que el Parlament tendría que haber escogido al president", ha lamentado añadiendo que en la agenda independentista se le añade la agenda de la recuperación económica y social. "La ciudadanía sufre porque han perdido amigos, familiares, ha perdido el trabajo o ha tenido que cerrar su negocio. Tenemos el deber y la obligación de estar a la altura", ha instado.

Aragonès ha pedido a sus actuales socios del Govern en funciones a "hacer honor a la palabra y cumplirla" y ha llamado a los 135 diputados a conjurarse para evitar una repetición electoral. "Serían un fracaso de todos los diputados y pondrían en riesgo el prestigio de las instituciones", ha dicho avisando que la desafección "por la tarea que aquí hacemos" está creciendo entre la ciudadanía.

Este mensaje ha llegado después que en los últimos días Junts y ERC se hayan distanciado todavía más y sólo hayan llegado a un acuerdo de mínimos en torno a la amnistía y la autodeterminación de la mano de la CUP. Por ahora, sin embargo, los dos principales partidos no se ponen de acuerdo ni si el próximo Govern tiene que ser de coalición o no.

 

Balance de la Covid y mensaje de esperanza

A nivel pandémico, Aragonès ha recordado a las más de 22.000 víctimas mortales que ha habido en Catalunya por la Covid-19 y ha lanzado un mensaje de esperanza basado en la aceleración del proceso de vacunación. "Hemos superado los 3 millones de dosis administradas", ha celebrado. Sin embargo, ha hecho mención de la grave situación que vive actualmente la India y ha recordado que la pandemia es un problema global que no se resolverá hasta que todo el mundo esté salvado.

Aragonès ha insistido en pedir al Gobierno en que retrase la segunda dosis de la vacuna de cuatro a ocho semanas para aumentar el número de personas inmunizadas en el tiempo más breve posible. Ha puesto de ejemplo que si la Moncloa aceptara la medida, Catalunya llegaría a los cinco millones de vacunados a mediados de julio, cosa que supondría que todos los mayores de 30 años ya estarían vacunados con la primera dosis.

El líder republicano ha hecho un llamamiento a llevar a cabo una reforma "estructural" del sistema de Salut y ha recordado a la ciudadanía que a pesar del optimismo por la vacunación y la bajada de los indicadores, "la pandemia no ha acabado y la Covid no se ha marchado".

El vicepresident también ha recordado que uno de cada dos euros dedicados a ayudas a los sectores afectados ha venido de la Generalitat y ha expuesto la mejora de algunos datos económicos a la vez que se empiezan a flexibilizar algunas restricciones como la previsión del crecimiento del PIB, la reducción del paro y del número de personas en ERTE y el aumento de exportaciones e importaciones. Por último, ha hecho un llamamiento a invertir los fondos europeos en transformar el sistema económico y productivo catalán para que sea más sostenible.

 

Imagen principal: El vicepresident en funciones de president, Pere Aragonès, en el pleno de este jueves / ACN