El alcalde de Lleida, Àngel Ros, será el nuevo embajador español en Andorra, una vez este país acepte el plácet —lo que se podría producir hoy mismo— y sea nombrado por el Consejo de Ministros, con toda probabilidad este mismo viernes.

Según adelanta el diario Segre, el Gobierno andorrano ya ha recibido la petición del plácet para el nuevo embajador y a finales de semana el nombramiento ya podría ser firme. Así se pondría fin a 14 años de mandato del socialista Àngel Ros al frente de la Paeria de Lleida cuando falta poco menos de un año para las próximas elecciones municipales.

Ros llegaría a la embajada en un momento en que otro leridano, Josep Borrell, está al frente de la diplomacia española como Ministro de Exteriores. Los dos se han significado activamente en sus posicionamientos contrarios al independentismo.

Ahora Borrell ofrece a Ros una salida honorable de la alcaldía justo después de unas semanas en que aumentaban las posibilidades que el alcalde dejara el cargo después del nombramiento de su yerno, José Crespín, como subdelegado del Gobierno en Lleida. La hipótesis de la marcha del alcalde se ha visto alimentada por las polémicas en las que se ha visto envuelto Ros los últimos meses a raíz del proceso independentista, desde las protestas por las declaraciones en las que consideró proporcionales las cargas policiales del 1-O, hasta la bronca que recibió en la exposición de la obra Presos políticos en la España contemporánea o las críticas por su presencia en manifestaciones de SCC.

El vacío en el Ayuntamiento podría ser ocupado por uno de los dos tenientes de alcalde actuales, Fèlix Larrosa o Montse Mínguez. Se da la circunstancia de que los dos tenían que ejercer de alcalde accidental este mes de agosto durante las vacaciones veraniegas de Ros.