Pedro Sánchez ahora sí que mueve ficha. Al día siguiente del ultimátum de Carles Puigdemont al Gobierno, amenazando con tumbarlo en una reunión el lunes en Perpinyà, el ejecutivo socialista da el paso para intentar conseguir la oficialidad del catalán en Europa, uno de los grandes acuerdos pendientes de cumplir con los independentistas desde el inicio de la legislatura. Tal como ha informado la Moncloa, los gobiernos español y alemán han acordado la creación de una mesa de negociación bilateral con la intención de que España acabe presentando un texto para debatir y conseguir el aval de los 27 estados miembro de la Unión Europea en una futura reunión del Consejo de Asuntos Generales. A pesar de que el anuncio llegue justo cuando Junts per Catalunya estaba dispuesto a dejar en manos de su militancia la continuidad de Sánchez en el poder, fuentes de la sala de máquinas de la Moncloa argumentan que "no han dejado nunca de mostrar su determinación" en esta carpeta. Salvador Illa ya se ha felicitado en un mensaje en su cuenta de Twitter (X). "Estamos más cerca de conseguir que el catalán sea oficial en la UE; tengo plena confianza en que lo haremos posible", ha dejado por escrito el president de la Generalitat.

Alemania ha sido hasta ahora el obstáculo más importante para conseguir que el catalán, el euskera y el gallego estén en igualdad de condiciones con el castellano y el resto de lenguas oficiales en Europa. Para conseguirlo, hace falta la unanimidad de todos los estados miembro de la UE. La oposición del país del canciller Friedrich Merz —que es uno de los más importantes del club comunitario— ha provocado, junto con las presiones diplomáticas de Alberto Núñez Feijóo, que el resto de estados gobernados por formaciones de la familia del Partido Popular Europeo también se opusieran a ello. El aval de los alemanes podría facilitar que el resto de países también se subieran al mismo carro.

Hace poco más de un mes, Sánchez y Merz se reunieron en el palacio de la Moncloa. En una posterior rueda de prensa conjunta, ambos certificaron que el anfitrión no consiguió convencer al invitado de rectificar su postura sobre la oficialidad del catalán. "Hace 40 años que lo esperamos y queremos conseguirlo en un momento no muy lejano", señaló el presidente español en aquella comparecencia. "Entiendo el interés, pero ya veremos cómo se resuelve", apuntaba Merz en una respuesta en la que confiaba en que con la inteligencia artificial se pueda resolver esta cuestión.

 

El Gobierno reclama a Puigdemont "responsabilidad y diálogo"

El Gobierno continúa intentando calmar los ánimos de Puigdemont. Antes del anuncio del inicio de una negociación bilateral con Alemania, el ejecutivo de PSOE y Sumar ha insistido en que pretende cumplir con todos los acuerdos pendientes con los independentistas, pero que hay algunos complicados porque dependen de terceros. También pide ahora “responsabilidad y diálogo” al president en el exilio. Le reclama exactamente lo mismo el PNV, una formación que está asociada con los socialistas tanto en Madrid como en Gasteiz. Este viernes, en declaraciones ante los periodistas, la vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha apelado a las conversaciones con Junts para superar la actual crisis. “Tenemos la necesidad de intensificar este diálogo”, ha afirmado aparte de repetir la misma idea que manifestó este jueves por la noche Pedro Sánchez desde Bruselas: “Los acuerdos que dependen de nosotros se han desarrollado, y trabajamos para que podamos cumplir lo que depende de terceros”. 

Se ha expresado en los mismos términos también este viernes la portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, que en declaraciones a los periodistas desde Zaragoza ha mostrado su “respeto” por la reunión de Junts en Perpinyà. Ha defendido que el ejecutivo capitaneado por los socialistas cumple los acuerdos alcanzados con los distintos grupos parlamentarios a cambio de la investidura de Sánchez en noviembre de 2023. La también ministra de Educación ha intentado hacer pedagogía y ha aseverado que el ejecutivo es consciente de que se encuentra en minoría parlamentaria, cosa que les obliga a negociar constantemente. Ha sentenciado que el diálogo con la formación independentista ha sido “más que positivo” durante el transcurso de la actual legislatura. 

Por otro lado, el ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, ha asegurado que España y Catalunya "se juegan mucho" y ha apelado a la "responsabilidad" de Junts. "Hay muchas cosas que se pueden construir conjuntamente a través del diálogo", ha manifestado el exalcalde de Barcelona. "Tenemos que esperar a su debate desde el respeto y no quiero añadir nada más cuando ellos están debatiendo", ha sentenciado.

El PNV pide “tener claro hasta dónde se puede tensar la cuerda”

La música del Gobierno va en armonía con la del PNV. Los jeltzales gobiernan Euskadi de la mano de los socialistas y el PSOE gobierna el Estado español con los nacionalistas vascos como socios imprescindibles en el Congreso de los Diputados. Este viernes, la portavoz del PNV en la cámara baja, Maribel Vaquero, ha afirmado que entiende la posición de Junts, pero ha advertido: "Somos muchos partidos los que sostenemos el Gobierno y muchas veces nuestros intereses no son comunes, pero tenemos que tener claro hasta dónde se puede tensar la cuerda".