Santiago Abascal tiene la lengua afilada, y en los últimos días, ha estado especialmente activo en su retórica ofensiva, propia de la ideología de ultraderecha que defiende. Si el pasado jueves hizo unas declaraciones provocativas que instaban a "hundir el barco de negreros Open Arms para que sirva de advertencia de cuál será el final que les espera en todos los multimillonarios y políticos que promuevan la invasión de Europa", este sábado disparó contra Pedro Sánchez. El líder de Vox acusó al presidente del Gobierno de tener "intereses en las mafias del tráfico de seres humanos", precisamente por haber defendido a Open Arms.

"Meterte en la prisión es más urgente"

"Es normal que como jefe de la mafia socialista tengas también intereses en las mafias del tráfico de seres humanos. Meterte en la prisión es la única cosa más urgente que hundir en los barcos de la invasión islamista, publicó Abascal en la red social 'X'. El político ultraderechista respondía así a las palabras que el presidente del Gobierno, que había publicado otro post en X en apoyo a la ONG catalana Open Arms, dedicada al rescate de migrantes en el Mediterráneo, después de las críticas mostradas a esta organización por el presidente de VOX. "Defender España es defender la vida. Nuestro apoyo y reconocimiento a Open Arms y a los que salvan vidas en el mar", había publicado Sánchez en su perfil oficial d'X.

En esta misma red social, Abascal había dicho el pasado miércoles que el barco de Open Arms era un "barco de negreros" y pedía "confiscarlo" y "hundirlo", unas declaraciones que despertaron multitud de críticas por parte de miembros del Gobierno. La ministra de Igualdad, Ana Redondo, también condenó las palabras del líder de Vox: "La inhumanidad, el menosprecio absoluto a los derechos fundamentales de las personas y el odio al diferente son posiciones políticas ilegítimas que no caben en nuestra Constitución, ni en nuestra democracia, ni en nuestra convivencia".

Entre otros, se pronunciaron el ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, calificándolo de "discurso de odio"; la vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, que pidió "más humanidad" frente a los "raudales de odio" de Abascal; la vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Sara Aagesen, que le afeó su "frivolidad" inadmisible, o el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, que tildó a Abascal de "fascista". Por su parte, el ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, recordó al líder de Vox que la ONG es una "organización humanitaria que rescata personas en el mar" y le preguntó si también pediría hundir el barco en caso de que "rescatara a sus padres, hermanos o hijos".

Desde de Open Arms aseguraron este viernes que "ser el objetivo del odio de según quién es un orgullo" y aseveraron que seguirán trabajando "enfrente del miedo y enfrente del odio". La respuesta del fundador de Open Arms, Òscar Camps, fue contundente y aseveró en un comunicado en sus redes que "decir que hay que hundir un barco que salva vidas es fascismo puro". Así, añadió que "negreros fueron los que comerciaban con esclavos", mientras que reivindicó que la tarea de la ONG es la de salvar vidas. "Más de 70.000 personas salvadas en 10 años: este es nuestra respuesta ante el odio", ha apuntalado Campos en un mensaje también en X.