Aumenta la cifra. Más de 200 teléfonos españoles fueron objetivo de un único cliente de Pegasus, según ha revelado este martes The Guardian. De hecho, el diario británico apunta al Marruecos como posible responsable porque entre los números seleccionados hay el de la activista saharaui Aminatou Haidar y el periodista especializado en el Magreb Ignacio Cembrero. La selección de los teléfonos se cree que tuvo lugar en el 2019, de acuerdo con los datos filtrados que se conocieron el año 2021 gracias a una investigación de diferentes medios de comunicación internacionales como el mismo The Guardian. Aquella investigación incluye más de 50.000 números de personas seleccionadas como posibles objetivos de espionaje por clientes de la empresa israelí NSO en todo el planeta.

Un teléfono de la mencionada Haidar fue objetivo de Pegasus desde el 2018, a la vez que se encontraron señales del software de espionaje en un segundo teléfono de la activista en noviembre del 2021. En la lista filtrada el año pasado también figura el número de móvil español del periodista Ignacio Cembrero, cuyo trabajo se centra en el Magreb. Sin embargo, la inclusión de más de 200 teléfonos seleccionados por un único cliente de NSO que se cree que es Marruecos no quiere decir necesariamente que todos ellos hayan sido atacados.

Ser objetivo no quiere decir ser espiado

Lo que quiere decir exactamente esta información es que el cliente, aparentemente, fue activo en la búsqueda de objetivos para la vigilancia dentro de España. La empresa israelí ya dijo que el hecho de que apareciera un número a la lista no indicaba de ninguna manera que fuera objeto de espionaje con Pegasus, de la misma manera que afirmó que la base de datos filtrada el año 2021 "no tenía relevancia" para la compañía. Todo, una versión compatible con la de Marruecos. El gobierno marroquí había negado previamente haber espiado a cualquier líder extranjero con el software espía y que los periodistas que investigaban NSO eran "incapaces de probar que el país tenía alguna relación" con la compañía israelí.

En cualquier caso, el CNI sigue en el punto de mira. Aunque el gobierno estatal haya mostrado su "apoyo total" a la directora de la inteligencia española, es verdad que ha evitado descartar una dimisión en los próximos días de la máxima responsable de los servicios secretos del Estado. La directora del CNI, Paz Esteban, comparecerá este jueves a puerta cerrada a la comisión de secretos oficiales. Eso sí: el PSOE ha vetado que el Congreso de los Diputados abra una comisión de investigación sobre el espionaje.