Como bien saben los que siempre han tenido en Seat una de sus marcas de referencia, el fabricante español tomó una decisión arriesgada hace ya cuatro años. Y esa no fue otra que la de hacer de su división deportiva Cupra una marca propia.

Si bien es cierto que muchas marcas generalista ya habían hecho lo propio hace años, como es el caso de Toyota con Lexus o de Citroën con DS, el movimiento era arriesgado teniendo en cuenta el proceso de cambio constante en el que se está moviendo el segmento del automóvil en los últimos tiempos.

 

Sin embargo, tras cuatro años ya como marca propia, es evidente que la jugada le ha salido más que bien a Seat y a Cupra. Una marca, Cupra, que puede presumir, de hecho, de tener ya uno de los modelos más vendidos en España. Una bendición que, a su vez, es uno de los grandes problemas del fabricante deportivo.

El Cupra Formentor es un súper ventas, pero es el único motivo de alegría de la marca en España

Si echamos un ojo a las ventas de Cupra en España en lo que va de año, podemos ver que entre enero y febrero la marca deportiva ha sumado ya ni más ni menos que 1.911 matriculaciones. Una cifra más que correcta que sitúa a la marca en una digan posición 18 en nuestro mercado.

El problema en su caso es que la inmensa mayoría de estas ventas corresponden únicamente al Formentor. De hecho, de las 1.911 ventas que ha logrado en estos dos primeros meses del año, ni más ni menos que 1.802 corresponden a este modelo. Un Formentor que, ojo, es ya el decimoquinto coche más vendido en este 2022 en España, un éxito que ni en la propia marca se esperaban.

Eso sí, saben muy bien en Cupra que, si realmente quieren ser una marca de presente y de futuro, no pueden vivir en nuestro país de un único modelo. Por muchas ventas que consiga el Formentor, Cupra necesita más soldados en esta guerra.

 

Y ahí es donde llega el problema. Si echamos un ojo al catálogo actual de la marca, vemos que tan sólo tiene tres modelos más a la venta. Por un lado, el Born, un modelo que, como el Formentor, sí que puede presumir de ser un cien por cien Cupra pero que, al menos de momento, no esta teniendo el éxito esperado.

Más allá de estos dos modelos, Cupra vende sus versiones deportivas del León, tanto en su versión normal como en la carrocería familiar, así cómo el Ateca, en este caso dos modelos que derivan directamente de Seat y en los que Cupra tan sólo pone su granito de arena en cuanto a deportividad.

Es cierto que en un futuro Cupra prepara llegadas importantes como la del Tavascan, un SUV que será el primer cien por cien eléctrico de la marca, pero, al menos de momento, su único motivo de alegrías es el Formentor, un modelo muy exitoso pero que no puede sostener él sólo el peso de toda la marca. Al menos no por mucho tiempo.