Los que acuden a los concesionarios de Mercedes lo hacen en busca de todo lo que puede darles una marca premium: calidad, lujo, buenos motores, lo último en cuanto a tecnología del sector y unos diseños elegantes y deportivos. En la marca alemana lo saben perfectamente, de ahí que cada vez sean más cuidadosos a la hora de seleccionar sus modelos.
Una marca que ha dado un importante paso adelante con un modelo que, eso sí, no lucirá precisamente la estrella de plata en su frontal. Y es que no es otro que el nuevo Smart, el #1, el primer modelo de la nueva tapa de la marca asociada a Mercedes que ha dejado a muchos con la boca abierta.
Entre otras cosas porque es el primer SUV fabricado por esta marca que nació a finales de los 90 y que siempre se había destacado por diseños originales y por un concepto de coche pensado por ahí para la ciudad.
Sin embargo, en un claro intento de llevar sus ventas a un nivel superior, Smart ha empezado esta nueva etapa centrada en los 100 × 100 eléctricos con un modelo mucho más polivalente.
El Smart #1 apunta a ser un modelo de éxito
La idea de la marca es seguir siendo uno de los referentes en cuanto a la movilidad urbana en el segmento premium. Es por eso que, pese a que este modelo cuenta con unas dimensiones claramente mayores a las que en sus modelos anteriores eran habituales, sigue siendo un SUV compacto.
Lo mejor en este caso es que, a diferencia de lo que ocurre en los catálogos de los generalistas, este Smart #1 no va a tener precisamente mucha competencia. Entre otras cosas porque son muy pocos los modelos premium que pueden presumir de tener sus características.
Un modelo que tiene en su diseño uno de sus principales argumentos de venta. Si bien es cierto que la parte técnica y la fabricación está a cargo de Geely, ha sido Mercedes la encargada de todos los relacionado con el diseño. Y ahí ha sido donde se ha notado que este modelo no es directamente un Mercedes.
Y es que no lo tiene que ver sus líneas de diseño con las que tienen los últimos modelos presentados por los alemanes. En este caso nos encontramos con un modelo mucho más futurista, con líneas mucho más redondeadas y que encajan incluso mejor con las tendencias actuales para el día a día en la ciudad de lo que suele ser habitual en los modelos de la firma de la estrella de plata.
Pero lo mejor es que, siendo como es un 100 × 100 eléctrico y por mucho que tenga un motor de ni más ni menos que 200 caballos, este modelo va a poder presumir de ser el SUV más barato diseñado por Mercedes.
Un modelo que apunta a ser una de las grandes bazas de esta nueva etapa de Smart, que está llamado a ser su mejor socio en un mercado que va al alza y una buena opción para los que buscan un modelo premium sin tener que acudir a Mercedes.