Casi una semana después de que se produjeran los terremotos en Turquía y Siria, la cifra de fallecidos sigue aumentando, y, según el último balance, se sitúa cerca de los 39.000. La Autoridad de Gestión de Desastres y Emergencias (AFAD), dependiente del Ministerio del Interior turco, ha informado en la tarde del domingo de que la cifra de muertos en Turquía asciende a los 29.605. La cifra de heridos no se ha actualizado en la última publicación, pero los últimos datos del gobierno turco apuntan a más de 80.000 heridos. En cuanto a Siria, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha calculado que 9.300 personas han muerto y 10.000 han resultado heridas a consecuencia de los terremotos. La cifra combinada de los dos países se acerca a la previsión de la ONU, que habla de 50.000 muertos.

Turquía investiga a responsables en la construcción de edificios defectuosos

AFAD ha señalado que desde el terremoto más fuerte, registrado el lunes con una potencia de 7,7 en la escala de Richter, se han producido 2.412 terremotos menores en Turquía. También ha explicado que 148.000 personas han sido desalojadas de las 10 provincias afectadas, que representan una superficie de 100.000 kilómetros cuadrados con una población de 10 millones de personas. Aunque ya han pasado muchos días, las tareas de rescate no se han detenido, y 233.000 personas continúan dedicadas a la búsqueda de personas vivas entre los escombros. Aunque parezca imposible, en las últimas 24 horas se ha rescatado a nueve personas más, incluidas una niña de 3 años y una anciana de 85, que llevaban entre 140 y 155 horas bajo edificios destruidos.

Aunque el terremoto ha sido una catástrofe natural, el ministro de Justicia turco ha informado de que "la Fiscalía está trabajando de forma intensiva para la apertura y ejecución de investigaciones judiciales y la detención de sospechosos responsables". De hecho, un centenar de personas han sido detenidas por su implicación en la construcción de edificios defectuosos que han agravado las consecuencias del terremoto.

Siria prevé que la cifra de muertos y heridos seguirán aumentando

El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesusis, se ha desplazado a la capital siria, Damasco, desde donde ha hecho una evaluación inicial de la situación. En las zonas de Siria controladas por el gobierno, han muerto 4.800 personas y 2.500 han resultado heridas. Por otra parte, en la zona controlada por los rebeldes, han muerto 4.500 personas y cerca de 7.500 han resultado heridas hasta el momento. El director regional de emergencias de la OMS, Rick Brennan, ha adelantado que "las cifras seguirán aumentando". En este sentido, el director ejecutivo del programa de emergencias de la OMS, Michael Ryan, ha señalado que el sistema sanitario de Siria ha quedado "pulverizado" por 10 años de inestabilidad por la guerra, y que es muy difícil que pueda dar una respuesta adecuada ante una catástrofe de estas dimensiones. "El país ha reaccionado de forma admirable, pero cuando estás exhausto solo puedes llegar hasta cierto punto: es imposible construir un sistema sanitario en una situación como esta", ha afirmado.