Los expertos en clima de las Naciones Unidas lanzan este lunes el informe más detallado e importante sobre la crisis climática. Se trata del sexto Informe de Evaluación del Panel Intergubernamental de Expertos en Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés), que sintetiza el contenido de los seis informes elaborados por este equipo. Tres grupos de trabajo del IPCC publicaron sus respectivos informes entre 2021 y 2022, con un primer texto centrado en la ciencia del clima y en cómo las actividades humanas han calentado la Tierra, especialmente desde el uso de los combustibles fósiles, un segundo que advierte sobre los impactos de este aumento de temperatura y un tercero, publicado en abril, sobre cuál es el margen de acción en este momento para superar las peores consecuencias de la crisis. Según la ONU, el umbral de seguridad o "punto de no retorno" para el planeta es un calentamiento de 1,5 °C para el 2100, de manera que los efectos negativos sean relativamente controlables. Este objetivo implica, según los científicos, una rebaja de las emisiones de gases de efecto invernadero de un 43% para 2030, una cifra que todavía nos queda muy lejos. "El ritmo y la escala de lo que se ha hecho hasta ahora y los planes actuales son insuficientes", alertan en una nota de prensa.

El informe más importante sobre el cambio climático

Después de una larga semana de negociaciones en Interlaken (Suiza), el equipo multidisciplinar de especialistas ha hecho públicas sus conclusiones, con las cuales aspiran a guiar la comunidad internacional sobre cómo hacer frente a la crisis climática y, más concretamente, a los grandes acuerdos a que tienen que llegar los mandatarios, en lo que queda de década. El objetivo fijado al Acuerdo de París de 2015 implica contener el calentamiento global por debajo de los 2 °C desde los niveles preindustriales y, si puede ser, por debajo de 1,5 °C, ya que esta subida de temperatura ya implica graves impactos —algunos, irreversibles— para la calidad de vida de los humanos y del resto de especies que habitan el planeta. Pero lamentan que en los últimos años, "este reto se ha hecho todavía mayor a causa del aumento continuado de las emisiones de gases de efecto de invernadero", que nunca han parado de incrementar. Para conseguirlo hoy por hoy, los autores estiman que el consumo de carbón se tendría que reducir un 95% para mediados de siglo con respecto a los niveles de 2019, el de petróleo en un 60% y el del gas en un 45%.

Los peligros del calentamiento global

El presidente del IPCC, Hoesung Lee, alerta en declaraciones a Efe uno de los riesgos del hecho de que se supere el límite de 1,5 °C es que tocamos los llamados puntos de no retorno o tipping points —que, una vez sobrepasados, desatarían una inercia de calentamiento muy difícil de combatir. En la nota que acompaña el informe en cuestión, avisan de que "cada incremento del calentamiento provoca una escalada rápida de los peligros. Las olas de calor más intensas, las precipitaciones más fuertes y otros extremos meteorológicos aumentan todavía más los riesgos para la salud de los humanos y los ecosistemas. En todas las regiones, la gente muere de calor extremo. Se espera que la inseguridad alimentaria y del agua impulsada por el clima aumente con un mayor calentamiento. Cuando los riesgos se combinan con otros acontecimientos adversos, como pandemias o conflictos, se vuelven todavía más difíciles de gestionar".