Julian Assange ha sido condenado por la justicia británica a un año de cárcel por violar la libertad condicional cuando pidió asilo en la embajada ecuatoriana en Londres el 19 de junio del 2012. La condena llega tras la detención, el pasado 11 de abril, tras años de residir en la embajada ecuatoriana.

Según avanza El Mundo, el fundador de Wikileaks cumplirá con toda probabilidad su condena en la prisión de Belmarsh, cerca de Londres. Assange entró en los juzgados de Southwark para conocer su condena con el puño en alto, ante un grupo de seguidores que reclamaron su puesta en libertad. La defensa ha pedido una mitigación de la sentencia por el tiempo cumplido en prisión preventiva, durante el proceso de extradición a Suecia, y por su la restricción de su libertad mientras duró su encierro en la embajada ecuatoriana.

Casos pendientes en Estados Unidos y Suecia

Además, Assange deberá comparecer el jueves ante otro tribunal en Westminster en la primera vista judicial por el proceso de extradición a Estados Unidos. El Departamento de Justicia le reclama por un delito de "intrusión informática" que puede costarle hasta cinco años de cárcel, aunque podría presentar nuevos cargos y endurecer su condena.

Finalmente, la fiscalía sueca podría reabrir el caso de la doble acusación por violación y abusos sexuales que provocó la detención inicial de Assange cuando se encontraba en Reino Unido. El caso fue archivado en el 2018, pero las dos denunciantes han reiterado su deseo de declarar contra el fundador de WikiLeaks y llegar hasta el final.