El ataque israelí de este domingo en los suburbios meridionales de la ciudad de Beirut, la capital de Líbano, ha causado un total de cinco muertos y 28 heridos, según el balance final ofrecido por el ministerio de Salud Pública libanés. El objetivo del ataque era un alto responsable del grupo militante chií Hezbolá, que la oficina del primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ha identificado como el jefe del Estado Mayor de la organización, el 'número dos', quien supuestamente lideraba "el fortalecimiento y el suministro de armas" de la organización, sin confirmar si había sido asesinado. Medios israelíes lo han identificado como Ali Tabatabai, que ya fue designado por el departamento de Estado de EE. UU. como 'Terrorista Global Especialmente Designado' en 2016 y por el que se ofrecían hasta 5 millones de dólares de recompensa a quien proporcionara información sobre él. En un comunicado, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han anunciado la muerte del comandante de Hizbulá a causa de su "preciso" ataque.

Ambas partes se acusan de romper el alto el fuego

Según ha informado la Agencia Nacional de Noticias libanesa (ANN), el ataque ha tenido como objetivo un edificio de apartamentos de la zona de Haret Hreik, en el barrio de Dahieh, que ha provocado "daños considerables en automóviles y edificios", con dos proyectiles impactando contra el inmueble, situado en la avenida principal de la zona. El último bombardeo contra el mismo barrio se produjo el pasado 5 de junio, cuando las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), bombardearon una "fábrica de drones" de Hezbolá y, como este último ataque, se produjo a pesar del alto el fuego vigente desde el 27 de noviembre de 2024 entre Israel y el Líbano que ambas partes se acusan de romper continuamente.

Según Israel, el rearme de Hezbolá, que el gobierno libanés ha planteado desarmar, tal como indica el alto el fuego, supone una violación flagrante de lo acordado. "Seguiremos haciendo todo lo necesario para evitar que Hezbolá recupere su capacidad de amenaza contra nosotros", advertía Netanyahu este domingo al inicio de la reunión semanal de su gabinete. En este sentido, en las últimas semanas la Fuerza Aérea israelí ha multiplicado sus ataques en posiciones de Hezbolá, en el sur del Líbano, alegando que se está rearmando "muy rápido" y que el gobierno libanés no hace lo suficiente para desarmarlo. Hezbolá, por su parte, denuncia que Israel nunca ha respetado la tregua y, aunque no ha respondido militarmente a la escalada de ataques israelíes, su líder, Naim Qassem, dijo hace dos semanas que "esta agresión y destrucción no pueden continuar".

El presidente del Líbano hace un llamamiento a la intervención internacional

El presidente del Líbano, Joseph Aoun, ha hecho un llamamiento este domingo tras el ataque a una "intervención internacional" para evitar un mayor deterioro de la situación en el país mediterráneo. "El Líbano, que se ha adherido al cese de hostilidades durante casi un año y ha presentado una iniciativa tras otra, reitera su llamamiento a la comunidad internacional para que asuma su responsabilidad e intervenga con firmeza y seriedad para detener los ataques contra el Líbano y su pueblo", ha dicho en un comunicado emitido por su oficina. Por ello, ha considerado que únicamente la intervención internacional podrá evitar un mayor deterioro de la situación que pueda reavivar las tensiones en la región, así como "más derramamiento de sangre". Joseph Aoun ya indicó el pasado viernes que su país está dispuesto a negociar "cualquier" acuerdo con Israel que permita poner fin a los continuados ataques, lo que, dijo, debería complementarse con apoyo internacional al ejército libanés.