¿Conoces ya la cocina de aprovechamiento? Esta práctica culinaria tiene muchos más beneficios de los que pensamos. No solamente se trata de aprovechar todos los alimentos que adquieres, sino que es para muchos una filosofía de vida.
Beneficios de la cocina de aprovechamiento
Aunque a primera vista pueda parecerte que la cocina de aprovechamiento solo te va a ayudar a ahorrar dinero, tiene otros muchos beneficios para ti y para los demás.
Ahorro económico
Al aprovechar todo lo que te ha sobrado para cocinar nuevos platos, estás ahorrando del presupuesto que destinas para la comida. Menos salidas al supermercado, lo que se traduce en menos gasto.
Ahorro de tiempo
Cuando ya tienes un pescado, una carne o unas verduras cocinadas a las que solo le tienes que añadir una salsa o saltear con otros ingredientes, por ejemplo, estás ahorrando el tiempo de preparación inicial.
Sostenible con el medio ambiente
Cuando compras menos estás ayudando al planeta, ya que las tierras, los animales, los transportes o las bolsas de plástico no están siendo usadas. Toda una filosofía de vida.
Despierta la creatividad
Si te gusta cocinar y te consideras una persona creativa la cocina de aprovechamiento te puede dar mucho juego. No tienes más que poner en un buscador ‘cocina de aprovechamiento recetas’ para encontrar cientos de posibilidades. Nosotros a continuación te daremos algunas ideas.

Esta práctica culinaria tiene muchos más beneficios de los que pensamos
Algunas ideas para tu cocina de aprovechamiento
La cocina de aprovechamiento es tremendamente versátil y creativa. No hay ni un solo plato que te haya sobrado que no puedas aprovechar para elaborar nuevas y ricas preparaciones.
Pan duro
Con el pan duro puedes hacer pan rallado y aprovecharlo para tus rebozados. La miga se puede utilizar como ingrediente de los gazpachos o el salmorejo. Puedes utilizar las rebanadas para hacer sopa de ajo o pan de ajo. También es ideal para preparar uno de los postres más típicos españoles: las torrijas.
Caldo de cocido
Con el caldo del cocido se pueden hacer otras sopas. Con arroz, con fideos, con verduras… También es ideal para darle más sabor a las croquetas y las salsas. Si vas a hacer otras sopas con él, congélalo en un bol grande. Y si lo vas a usar para darle sabor a salsas, puedes congelarlo en cubiteras de hielo.
Carne de cocido
La carne del cocido te puede servir para hacer croquetas o para revueltos, empanadas, rollitos de primavera, tacos mexicanos, ropa vieja, lasaña o canelones, por ejemplo.
Patatas
¿Quién no ha hecho nunca patatas fritas de más? Con las patatas puedes hacer tortillas y revueltos. Y con las patatas cocidas pues puré, ensaladas, patatas a la importancia o bolitas rebozadas. También puedes añadirlas a algún guiso justo antes de apartarlo.

Sobras de pescado
Las sobras de pescado también ofrecen muchas posibilidades. Con ellas se pueden hacer albóndigas, croquetas, hamburguesas, pescado en salsa, salpicón o puding.
Garbanzos y lentejas
Si te han sobrado garbanzos del cocido puedes utilizarlos para preparar hummus, ensalada de garbanzos, garbanzos fritos con carne, con espinacas, hamburguesas vegetales… Con las lentejas puedes preparar cremas deliciosas a las que les puedes añadir pan frito, unas semillas o unos trocitos de jamón serrano, por ejemplo.