Tal día como hoy del año 1877, hace 145 años, en Pueblo de Adolfo Alsina (actualmente Carhué, provincia federal de Buenos Aires); moría Adolfo Alsina; en aquel momento ministro de Guerra y de Marina del gobierno de Argentina; y que con anterioridad había sido gobernador de Buenos Aires (1866-1868) y vicepresidente de la República (1868-1874) por la formación federalista Partido Autonomista. Según las fuentes documentales, Adolfo Alsina murió a causa de una infección, provocada por alguna bacteria, que le provocó un fallo renal. Inicialmente fue soterrado en Carhué, pero cuarenta años más tarde (1917) sus restos fueron trasladados a la capital del país.

Adolfo Alsina era hijo de Valentín Alsina (Buenos Aires, 1802 – 1869); que había sido gobernador de Buenos Aires (1858-1859) y presidente del Senado de la República Argentina (1862-1864 y 1865-1869) por la formación política centralista Partido Unitario. Y era nieto de Joan Alsina Gaza (Barcelona, circa 1760 – Buenos Aires, 1807); que se había establecido en Río de la Plata en 1782; y que sería uno de los fundadores de la compañía militar Miquelets de Catalunya, más tarde obligadamente renombrados como Miñones de Cataluña, decisivos en el rechazo de la invasión británica (1806-1807), y en la expulsión de las tropas coloniales españolas (1810-1814).

Alsina fue un pionero de la conquista de la Pampa, el Far West de la República Argentina. Cuando inició su mandato como ministro de Guerra (1874), la frontera con los territorios indios estaba situada a unos doscientos kilómetros en el oeste de Buenos Aires. Pero solo en tres años la desplazó quinientos kilómetros al oeste, incorporando los actuales estados de La Pampa, Río Negro y San Luis. Su sucesor, el general Julio A. Roca (San Miguel de Tucumán, 1814 – Buenos Aires, 1814); y nieto del catalán Pere Roca (Tarragona, circa 1770), sería el continuador de la empresa conquistadora de las llanuras de la Pampa, hasta las cimas de la cordillera de los Andes.