Tal día como hoy del año 1769, hace 251 años, en Aiacciu (Córcega-Francia), nacía Nabulione Bonaparte, que en el transcurso de su vida sería en dos ocasiones emperador de los franceses, como Napoleón I. La primera vez (de 18/05/1804 a 06/04/1814), sería también el jefe de estado de los catalanes. Entre 1810 y 1814 (oficialmente entre 1812 y 1814) y durante el reinado de José I de España, Catalunya fue transferida al Imperio francés; y organizada como una región más de Francia: fue dividida en cuatro departamentos gobernados por prefectos. También durante esta etapa, la lengua catalana recuperó la condición de oficialidad de la cual Felipe V (el primer Borbón hispánico) le había quitado en 1717.

Según algunas investigaciones historiográficas, Napoleón era descendiente del mallorquín Hug Bonapart, funcionario de la corte del conde-rey Martín I y el último regente catalán en la isla de Córcega (1409-1414). También, según las mismas investigaciones, los Bonaparte -que eran una rama menor de los Berenguer- abandonaron Córcega después de la derrota del partido procatalán (1434) en la guerra civil de la isla; y se refugiaron en Florencia durante dos o tres generaciones; motivo que explicaría la transformación del apellido a Buonaparte. Napoleón nació el año después de que una revolución local (1768) pusiera fin a tres siglos largos de dominio genovés y entregara el dominio de la isla a Francia.

Napoleó Bonaparte se convertiría en una de las principales figuras de su época y en una de las más destacadas de la historia universal. Ensanchó los dominios de Francia desde Schelswig-Holstein (en el norte) hasta Catalunya (en el sur); y desde Dalmacia (en el este) hasta Bretaña (en el oeste). Después de Napoleón, Catalunya sería reincorporada al régimen absolutista de los Borbones hispánicos (1814), poniendo fin a la primavera política, cultural, económica y social que había vivido durante la integración en el Imperio francés; y Francia perdería el liderazgo continental que ostentaba desde la Paz de los Pirineos (1659). Napoleón murió desterrado por sus enemigos en la isla Santa Helena (1821).