Tal día como hoy del año 1794, hace 228 años, en París, un nutrido grupo de miembros de la Convención (una especie de Parlamento formado, exclusivamente, por los revolucionarios que gobernaban el país), que, poco después, se convertirían en los dirigentes del nuevo régimen revolucionario conocido como la "Reacción de Termidor"; resolvían —sin juicio de ningún tipo— ejecutar a veintinueve dirigentes del llamado "Régimen del Terror", que habían gobernado la Primera República francesa desde su proclamación (1793). Entre estos veintinueve condenados había las cuatro principales figuras del Régimen del Terror: Robespierre, Danton, Saint-Just y Couthon.

Precisamente Georges Couthon (Orcet, Auvèrnia, Occitania, 1755), que había pasado por varios lugares del poder regional y estatal revolucionario, y que había sido presidente de la Convención entre el 21 de diciembre de 1793 y el 5 de enero de 1794; había trabajado intensamente para la exportación de las ideas revolucionarías. Para llevar a cabo este plan, Couthon había propuesto ampliar los dominios de la República Francesa hasta los límites históricos del imperio de Carlomagno (800). Eso significaba que Catalunya —entonces una provincia sometida de la España borbónica— pasaría a formar parte de la República como una región más de la Francia metropolitana.

Couthon pensaba que la resistencia catalana durante la Guerra de Sucesión (1705-1715) era una experiencia a tener en cuenta que explicaba muchas cosas de los catalanes. Couthon propuso la ocupación de Catalunya y la creación de una república independiente, que sería gobernada por las élites intelectuales del país y que actuaría como una plataforma de proyección de la Revolución hacia la península Ibérica. En el plan de Couthon estaba previsto reunificar la Catalunya del norte y el Principado. Sin embargo, aquel plan que habría convertido Catalunya en una república independiente no fue posible porque Couthon y su gobierno serían ejecutados el 28 de julio de 1794.