Tal día como hoy del año 1826, hace 199 años, en Washington se celebraba el 50.º aniversario de la Declaración de Independencia de los Estados Unidos (1776), y aquel mismo día morían, por causas naturales, John Adams —en Quincy, Massachusetts— y Thomas Jefferson —en Charlottesville, Virginia—, segundo y tercer presidentes del país, respectivamente (1797-1801 y 1801-1805), y figuras consideradas "padres de la patria" por su protagonismo en la guerra de la Independencia (1776-1783) y en la consolidación y proyección de aquel nuevo Estado (último cuarto del siglo XVIII y primer cuarto del siglo XIX).

John Adams nació en 1735 en Quincy (entonces colonia británica de Massachusetts) en una familia formada por John Adams sénior, agricultor y diácono de la Iglesia Congregacionalista local y funcionario colonial, y de Susanna Boylston. Los padres de John Adams eran descendientes del grupo de galeses de la pionera Compañía de la Bahía de Massachusetts (siglo XVII), conocidos como los "puritanos de Nueva Inglaterra". Se formó en derecho, ejerció como abogado, fue uno de los líderes de la Revolución de 1765 y fue uno de los redactores de la Constitución de los Estados Unidos (1788).

Thomas Jefferson nació en 1743 en Charlottesville (entonces colonia británica de Virginia) en una familia formada por Peter Jefferson y Jane Randolph, propietarios de una explotación agrícola dedicada al cultivo y exportación de tabaco y descendientes de la aristocracia nobiliaria escocesa que se había establecido en las colonias americanas (siglos XVII). Jefferson fue un erudito en varias disciplinas científicas y académicas (arquitectura, arqueología, música), fue el fundador de la Universidad de Virginia y fue el principal redactor de la Declaración de Independencia.