El presidente de Seat, Wayne Griffiths, ha asegurado este martes que la inversión del grupo Volkswagen en una fábrica de baterías en España está condicionada al hecho de que se vendan coches eléctricos, y ha emplazado al Gobierno y en las autonomías a acelerar la implementación de las ayudas para comprarlos.

"Si no se venden coches eléctricos a España, no hace falta fabricarlos y no hace falta tampoco una fábrica de baterías", ha subrayado Griffiths después del lanzamiento del nuevo modelo de la compañía, el Cupra Born.

El directivo de Seat ha lamentado que España esté en la cola de Europa en la venta de coches eléctricos con un 5% de la cuota del mercado y sólo por encima de Grecia, y ha afirmado que las conversaciones que mantiene en estos momentos con el Ejecutivo español van sobre "como se arranca el mercado de eléctricos en España".

En esta línea Griffiths ha pedido "acelerar" la implantación del plan MOVES III para aumentar la venta de vehículos eléctricos del Estado. Al mismo tiempo, ha asegurado que la falta de coches eléctricos es por la falta de ayudas y la falta de puntos de recarga, dos aspectos previstos en el plan del Gobierno para incentivar la movilidad sostenible.

Griffiths no solo se ha pronunciado sobre la planta de baterías de Martorell, y también ha dado su opinión sobre la formación del nuevo gobierno de la Generalitat. El máximo responsable de Seat ha valorado positivamente la constitución de un nuevo Govern de la Generalitat que liderará Pere Aragonès.

Martorell recupera el ritmo de producción

Estas palabras de Griffiths llegan la semana antes de que la planta de Martorell restablezca ritmo de producción, que se vio afectada por la falta de semiconductores, con la recuperación de los tres turnos en la línea 2, después de que toda la plantilla haya abandonado ya el expediente de regulación temporal de empleo (ERTE).

El ERTE, que se puso en marcha a mediados de enero ante los problemas de suministros de estos chips, finalizará oficialmente el próximo 30 de mayo, pero, en la práctica, ha sido este lunes cuando los pocos trabajadores que continuaban afectados han abandonado el expediente.

Fuentes de la compañía han confirmado este punto y han destacado que la fábrica se prepara para empezar a funcionar a partir del lunes 31 de mayo a tres turnos en la línea 2, la que produce el Cupra Formentor y el Seat León; y con 2,5 turnos en la línea 1.

La automovilística pretende también acelerar la producción en el segundo semestre del año con medidas como el trabajo en sábados en junio y además la apertura de la fábrica en agosto para que esté operativa la línea 2, con las cuales intenta recuperar la producción perdida por el ERTE.