La Cambra de Comerç de Barcelona quiere abrirse todavía más a las empresas. Para hacerlo, invertirá unos cuatro millones de euros en remodelar su sede operativa. Así, estas ocuparían un total de cuatro de las diez plantas del edificio. El actual inmueble ya cuenta con un piso completamente transformado, el dedicado al llamado 'Hub cambraDigital', un espacio de 800 metros cuadrados, abierto a todo el tejido empresarial.

Ahora, el equipo de gobierno de la Cambra, comandado por su presidenta, Mònica Roca, se propone poner todavía más la institución al servicio de las empresas, especialmente las pymes, y por eso en los próximos meses quiere iniciar las obras para remodelar otras tres plantas siguiendo esta filosofía. Eso supondría 3.000 metros cuadrados adicionales destinados a las empresas, un espacio que la entidad quiere que se convierta en un 'hub' para acelerar el crecimiento de las compañías.

Asesoramiento profesional

Las obras de remodelación se estima que podrían alargarse unos 12 meses y el presupuesto de este proyecto de transformación se calcula entre los 3,8 y los 4,4 millones de euros, que la Cámara cubriría con recursos propios. Una vez culminado el proyecto en el número 452 de la Avenida Diagonal, donde se encuentra la sede, estas plantas podrían acoger a entre 200 y 230 personas, mientras que los 130 empleados de la Cambra ocuparían otras cuatro plantas del edificio, con lo cual se fomentaría la relación entre los dos colectivos.

Según explica su tesorero, Jordi Pomarol, si bien los espacios permitirían el cotrabajo, estos estarían pensados fundamentalmente para hacer crecer las empresas y autónomos que se instalen allí, ya que los servicios de la entidad los ayudarían a hacer un diagnóstico sobre su negocio, los asesorarían y los acompañarían en todo el proceso.

Mejoran las previsiones

El objetivo que tiene la Cámara con todos estos cambios es transformarse en una corporación de derecho público "del siglo XXI". "Queremos ayudar en las empresas a dar el salto, a crecer, y si estamos pidiendo a las empresas ser más fluidas, nosotros nos tenemos que aplicarnos la misma medicina", asegura Pomarol, que ve necesario pasar página de la imagen de una Cámara "apalancada en la vieja economía", con despachos "de caoba".

El miércoles pasado, la entidad se mostró optimista y mejoró las perspectivas económicas para este 2021 hasta el 6,3% y también las de 2022 hasta el 6,7%. Concretamente, la Cámara considera que el fin del estado de alarma y el relajamiento de las medidas contra la pandemia han supuesto un cambio favorable en la evolución de la economía catalana durante el segundo trimestre del año aseguran que el empresariado puede afrontar el tercer trimestre con expectativas crecientemente positivas "a todos los sectores económicos".

En la imagen principal, el edificio de la Cambra de Comerç de Barcelona, en la Avenida Diagonal / Europa Press