La Comisión Europea ha acusado formalmente este martes a la multinacional estadounidense Amazon de haber utilizado en su propio beneficio información confidencial de  empresas que utilizan la plataforma de ventas, violando de esta forma las reglas comunitarias de competencia.

Las autoridades comunitarias han enviado a la firma dirigida por Jeff Bezos un pliego de cargos en el que confirman las sospechas por las cuales iniciaron una investigación en profundidad en julio del año pasado. Se trata de un nuevo paso de un procedimiento que podría resultar en una multa si el gigante digital no resuelve las acusaciones de Bruselas.

Distorsionar la competencia

"Debemos asegurar que el doble papel de las plataformas con poder de mercado, como Amazon, no distorsionan la competencia. La información sobre las actividades de terceros vendedores no debe utilizarse en beneficio de Amazon cuando esta actúa como competidor de estos vendedores. Las condiciones de la competencia en la plataforma de Amazon deben ser justas", ha resumido la vicepresidenta del Ejecutivo comunitario responsable de Competencia, Margrethe Vestager.

Además, Bruselas ha abierto un nuevo expediente contra Amazon por un posible "trato preferente" hacia sus propias ofertas minoristas y las de aquellos proveedores que utilizan sus servicios de logística y reparto. En el pliego de cargos, la Comisión Europea informa a la empresa de su conclusión "preliminar" de que ha violado las normas de competencia de la Unión Europea (UE) al "distorsionar la competencia en el mercado minorista en línea".

Uso en beneficio propio 

Según la Comisión, Amazon depende "de manera sistemática" de datos empresariales de los comerciantes independientes que venden en la plataforma del gigante digital. Esos datos no son públicos y su uso beneficia al negocio minorista de Amazon, que compite de manera directa con los demás comerciantes.

Así, Amazon tiene acceso a datos de las empresas terceras que usan la plataforma para vender, como el número de productos pedidos y distribuidos, los ingresos de los vendedores en el mercado, el número de visitas a las ofertas de los vendedores, así como datos relacionados con el reparto o los resultados pasados de las compañías.

De acuerdo con los hallazgos preliminares de la Comisión Europea cantidades "muy grandes" de datos de los comerciantes terceros están a disposición de los empleados del negocio minorista de Amazon y fluyen de manera directa a sus sistemas automatizados, que agregan esa información y la usan para "calibrar las ofertas minoristas y las decisiones empresariales estratégicas" del gigante tecnológico, en detrimento de los demás vendedores. Por ejemplo, permite a Amazon centrar sus ofertas en los productos más vendidos y ajustarlas a la vista de los datos de las otras compañías.