La ‘unidad B’ fue una cosa que patentó Zinedine Zidane, y que dio grandes alegrías al Real Madrid. Aprovechó al máximo la profundidad de plantilla que tenía en ese momento, y sacó un gran rendimiento a los jugadores menos habituales, que se convirtieron en piezas indispensables para conquistar los títulos que levantaron. Futbolistas como Álvaro Morata, Pepe, Mateo Kovacic, James Rodríguez o Isco Alarcón tuvieron mucho protagonismo, pese a que no eran titulares, y aportaron una gran cantidad de goles y de asistencias.

Pero Carlo Ancelotti no ha sido capaz de aprovechar este recurso. Siempre confía en las mismas piezas, y prácticamente no hace rotaciones, y es un factor que claramente ha perjudicado al equipo. Algunos cracks han llegado muy cansados a la recta final del curso, y se ha podido comprobar en La Liga Santander, donde ya no tienen opciones al título. Y muchos suplentes no tienen ritmo competitivo, como puede ser el caso de Aurelien Tchouameni.

No se explica la nula continuidad que está teniendo el internacional francés, que fue una apuesta personal de Florentino Pérez. Pagaron casi 100 millones de euros al AS Mónaco por sus servicios hace menos de 12 meses, y de momento su sitio se ha encontrado en el banquillo. Ni siquiera en un choque sin trascendencia como el del Girona apareció en el once inicial, y es un problema grave que en el Santiago Bernabéu deberán de solucionar.

Asimismo, Lucas Vázquez es otro ejemplo de ello. Para Zidane fue vital en el Madrid, ya que podía ocupar muchas demarcaciones, y en todas rendía a un nivel muy aceptable. Pero con ‘Carletto’ ha sido relegado al ostracismo, y no ha tenido oportunidades. Esta falta de minutos ha hecho que no esté preparado físicamente para jugar al máximo nivel cuando salta al terreno de juego, y cuando ha estado sobre el césped ha ofrecido un rendimiento muy discreto.

Y las numerosas lesiones que han sufrido los indiscutibles de Ancelotti tienen una simple explicación: no ha sabido dosificarlos, y ha querido exprimirlos hasta el límite.

Eden Hazard, otra evidencia de la mala gestión de Ancelotti

Para finalizar con la lista de perjudicados por la mala gestión de plantilla de Ancelotti, nos encontramos con Eden Hazard. Aunque las expectativas que había con el ‘7’ eran nulas, podría haber aportado mucho más, en caso de que le hubiera mostrado confianza.

Sin embargo, jugando tan poco como lo ha hecho, es imposible que pueda ser de ayuda para el Madrid.