Las últimas horas en el Barça han sido muy movidas. Tras una semana para olvidar en la que el conjunto blaugrana se ha despedido de la Champions League y la Liga, sufriendo dos derrotas dolorosas, una en Montjuïc contra el Paris Saint-Germain y otra en el Santiago Bernabéu contra el Real Madrid, Xavi Hernández, Joan Laporta y Deco han protagonizado una tarde llena de reuniones para decidir el futuro del técnico egarense, que tras un giro de los acontecimientos inesperado, seguirá una temporada más al frente del equipo.
La junta directiva había aprobado por unanimidad el cese de Xavi Hernández
Una decisión inesperada teniendo en cuenta que hace varios meses aseguró que se iría a final de temporada y que, tal como ha informado el periodista Jordi Basté en RAC1, la junta directiva había aprobado de forma unilateral prescindir de sus servicios al término de la temporada. Esta reunión entre los directivos blaugrana se ha celebrado a primera hora de la tarde y parecía una sentencia definitiva, cosa que iba a suponer un cambio en el proyecto deportivo con la incorporación de un nuevo técnico que, muy probablemente, iba a ser Hans Flick, que tenía mucha ilusión de llegar a Barcelona.
Sin embargo, a última hora de la tarde, rozando la hora de cenar, la cumbre se trasladó a la casa de Joan Laporta, donde acudieron Deco, Rafa Yuste, Enric Masip, Bojan Krkić y, lógicamente, Xavi Hernández. Y tras este pequeño comité, se acabó decidiendo que Xavi siga siendo el entrenador otra temporada más, cumpliendo el contrato que tiene firmado con el Barça, que termina el 30 de junio de 2025. La continuidad del entrenador de Terrassa se conoció ayer por la noche, pero en pocas horas ya se han conocido más detalles sobre las claves de este giro de guion.
Xavi Hernández no iba a perdonar el año que le restaba en su contrato
Y según ha informado la misma fuente citada anteriormente, el principal motivo que explica este pacto entre Xavi Hernández y Joan Laporta es que el entrenador culé habría exigido cobrar el año de contrato que le resta en caso de irse en junio. Es decir, pese a la opinión contraria de la junta directiva, Xavi quería seguir liderando el proyecto blaugrana una temporada más, pues sentía que el vestuario seguía con él y que la irrupción de jóvenes como Pau Cubarsí o Lamine Yamal puede dar muchas alegrías a corto y largo plazo.
Ahora bien, esto ha provocado también una fuerte crisis en la junta directiva, que se siente engañada por su presidente. De hecho, se especula con que varios miembros de ella estarían meditando salir del club tras ver que su opinión no se tiene en cuenta. Es decir, el Barça ha vivido una nueva crisis deportiva que ha finalizado con la continuidad de Xavi. Solo el tiempo dirá si ha sido la decisión correcta.