El Real Madrid vive un momento crítico. Tras la derrota frente al Celta, el equipo volvió a caer en el Bernabéu, esta vez ante el Manchester City (1-2). Los blancos comenzaron bien, con un gol inicial de Rodrygo, pero el City supo remontar y gestionar los tiempos del partido. Los madridistas fueron de más a menos en la primera parte, y de menos a más en la segunda, pero no lograron sumar. La sensación de oportunidades perdidas se repite jornada tras jornada.
Xabi Alonso logró salvarse por el momento. En la cúpula del club, se temía un despido inmediato tras un resultado negativo. Pero la actitud del equipo le otorgó una bola extra. El Madrid mostró cierto espíritu de Ancelotti, con un planteamiento defensivo y contragolpes al recuperar el balón, aunque con escaso acierto a portería.
Vinícius y Jude Bellingham, principales señalados en la derrota contra el Manchester City
Aun así, el partido dejó varios jugadores señalados. La Pizarra de Quintana abrió un debate sobre la derrota y la crisis estructural del equipo. Se puso el foco en los pesos pesados del vestuario, especialmente en Vinícius y Jude Bellingham. Dos jugadores que, ante la ausencia de Kylian Mbappé, deberían haber marcado las diferencias. Pero nada más lejos de la realidad. Y el míster tiene cada vez más sospechas de que le están haciendo la cama.
Sobre Vinícius, en La Pizarra de Quintana se destacó que “no acepta ser sustituido”. El episodio contra el Barça marcó un punto de inflexión en la autoridad del entrenador. Según los tertulianos, Vinícius “cree que no le pueden cambiar con el rendimiento que está dando”, un comportamiento que consideran gravísimo. La influencia del brasileño se ha convertido en un problema interno que condiciona el proyecto de Xabi Alonso.
En cuanto a Bellingham, la tertulia señaló que representa “lo que es el Madrid hoy”: un jugador que se deja todo, pero “no es determinante como el del primer año”. Su encaje táctico genera un quebradero de cabeza para el técnico vasco. La falta de adaptación de Bellingham al modelo de Alonso aumenta la presión sobre el conjunto.
Vinícius y Bellingham están condenando a Xabi Alonso
Los tertulianos coincidieron en que el Real Madrid sigue siendo “el equipo de la temporada pasada”, sin evolución y con los mismos defectos estructurales. La disciplina interna se resiente, y sin una reforma profunda que incluya decisiones duras con las estrellas, el club permanecerá en un patrón "irreconducible".
La situación es alarmante. La relación de Xabi Alonso con Vinícius y Bellingham marca la crisis interna y condiciona cualquier estrategia futura. El técnico necesita actuar rápido, imponer autoridad y recuperar el control del vestuario. De lo contrario, su proyecto se hunde sin salvavidas.
En La Pizarra de Quintana lo tienen claro. Sin cambios estructurales, el Real Madrid se enfrenta a una temporada comprometida, donde la fractura interna podría determinar el futuro del equipo y del propio Xabi Alonso.