El Manchester United está muy cerca de concretar uno de los primeros traspasos del mercado estival. Porque las conversaciones con Pau Torres están muy avanzadas, y en varios medios aseguran que el futbolista y sus representantes pronto cogerán un vuelo a Inglaterra para negociar los últimos detalles que faltan, antes de poder ponerse a las órdenes de Erik Ten Hag. El técnico holandés tiene varias peticiones, y una de ellas es la contratación del defensa del Villarreal.
Cree que necesita mejorar la retaguardia, y encontrar a un acompañante de lujo para Raphaël Varane, y ha identificado al internacional español como la mejor alternativa posible. Parece que no confía en absoluto en Harry Maguire, el central más caro de todos los tiempos, y quiere relegarle a la suplencia, a pesar del precio que pagaron por él, y pese a ser el capitán de la plantilla. Porque el ex del Málaga llegaría para ser un fijo en el once inicial.
Unai Emery prácticamente lo da por perdido, y la compensación económica que recibirán los ’groguets’ rondará entre los 50 y los 75 millones de euros. De esta manera, deberán de encontrar a un sustituto de completas garantías, una tarea que no será nada sencilla, debido a que estamos hablando de uno de los mejores defensores de todo el planeta. Si nada se tuerce a última hora, se marchará a la Premier League, donde seguirá con su carrera.
La progresión que ha experimentado Torres en las últimas campañas es digna de estudio, y ahora espera seguir coleccionando hazañas en Old Trafford. Le prometen un proyecto muy ambicioso, y un salario muy elevado, si bien en su primer año se tendrá que conformar con disputar la Europa League, después de no haber conseguido la clasificación a la Champions League. Aún y así, Ten Hag ha logrado convencer al crack nacido en 1997 para que se incorpore a la plantilla ‘red devil’.
Se ha adelantado al resto de pretendientes que tenía, y si todo va según lo previsto, el anuncio oficial puede producirse durante el mes de junio.
Florentino Pérez lleva años intentando fichar a Pau
Entre los admiradores de Pau se colocaba al Real Madrid, que no ha perdido de vista su evolución en ningún momento. Florentino Pérez contactó con él en varias ocasiones, la última de ellas, el año anterior, cuando se confirmó la marcha de Sergio Ramos al Paris Saint-Germain.
Este verano también tenía en mente su incorporación, pero acabó decantándose por Antonio Rüdiger, que convencía mucho más a Carlo Ancelotti, y llegará con la carta de libertad.
Desde el Santiago Bernabéu deberán de olvidarse de Torres.