El FC Barcelona vive días de decisiones complicadas. Hansi Flick se enfrenta a una de las elecciones más delicadas desde su llegada al banquillo azulgrana. La lesión de Dani Olmo ha dejado un vacío importante en la mediapunta, y el técnico alemán debe decidir si apostar por Fermín López desde el inicio o dar minutos al joven Dro Fernández, una de las promesas que más ilusionan en la cantera.

El regreso de Fermín López, tras casi un mes fuera por una lesión muscular en el psoas ilíaco izquierdo, es una de las mejores noticias para Flick. El onubense ha trabajado sin descanso durante el parón de selecciones y ya tiene el alta médica. Su evolución ha sido excelente, y todo apunta a que podría estar listo para volver como titular ante el Girona. Pero la decisión no es sencilla.

Fermín López calentamiento Barça

Pedri quiere a Fermín López a su lado

Pedri ha dejado claro en el vestuario que quiere a Fermín a su lado. Lo considera un jugador clave por su energía, su capacidad para romper líneas y su entendimiento natural con los centrocampistas. Sin embargo, el pensamiento no está solo puesto en el próximo partido. Con el Clásico a la vuelta de la esquina, se teme una recaída si el jugador no está al cien por cien.

En este contrexto, el entrenador alemán valora una segunda opción: Dro Fernández. El joven centrocampista ha dejado muy buenas sensaciones en los entrenamientos. Tiene desparpajo, técnica y una madurez sorprendente para su edad. Además, su aparición permitiría que Fermín tuviera una entrada progresiva en la rotación, evitando riesgos innecesarios. Sería una apuesta valiente, pero también arriesgada, teniendo en cuenta la importancia de los puntos en juego y la necesidad de llegar al Santiago Bernabéu con opciones de recuperar el liderato.

Dro Fernández

Flick prefiere ser prudente y no arriesgar con Fermín

En el cuerpo técnico hay división de opiniones. Algunos asistentes creen que Fermín debe jugar porque su presencia cambia la dinámica del equipo. Otros, más prudentes, opinan que sería mejor esperar al duelo europeo o al propio Clásico para recuperarlo con total garantía. Lo cierto es que Flick tiene ante sí una decisión estratégica que podría marcar las próximas semanas del Barça.

En los despachos, la confianza en Flick es total. El alemán ha logrado reordenar el vestuario, reforzar la mentalidad del grupo y devolver al equipo una intensidad competitiva que se había perdido. Pero ahora debe demostrar su capacidad de gestión. Su decisión no solo afectará al once ante el Girona, sino también al equilibrio del mediocampo, donde Pedri se siente más cómodo con un socio que entienda su ritmo y su visión.