Todo Rey Mago necesita un buen paje, un acompañante que realce su magia, que hable su idioma. Y Messi hacía demasiado tiempo que tenía que atravesar el desierto en solitario, al quedarse sin Xavi, Iniesta y Neymar, los tres mejores acompañantes que ha tenido en la última década.
Por eso Messi sonreía como un niño con un juguete nuevo tras marcar el 1-2. Acababa de recibir un regalo mágico de Pedri, jugador con el que tiene una química especial. Llevan poco tiempo juntos, pocos entrenamientos y menos partidos, pero cuando comparten terreno de juego resurge la magia. Y el gol de Messi es un gran ejemplo, pues el argentino superó a Unai Simón tras una dejada impresionante de Pedri con el talón, que incluso dejó descolocado al portero de los leones. "La jugada ha sido muy rápida. Leo pasa por detrás, no lo veo que sé que está detrás", explica el canario.
Los jugadores del Barça, felicitando a Pedri tras el 1-1 del canario / EFE
Pedri-Messi: conexión letal
Y este golpe de magia de Pedri no ha sido su primera aparición estelar en San Mamés, pues antes ha sido el protagonista del 1-1, tras completar con un certero remate de cabeza una gran dejada de De Jong que, a su vez, había recibido un cambio de juego teledirigido de Messi. De hecho, la falta de instinto goleador es justamente el único "pero" que se le puede achacar a Pedri en su espectacular inicio de aventura blaugrana, otro aspecto del juego en el que se parece a Andrés Iniesta. Hoy, sin embargo, no ha fallado. "En mi vida había marcado un gol de cabeza. Estoy muy contento", ha reconocido Pedri al acabar el partido.
Con el gol, Pedri ha tranquilizado los ánimos de un Barça que ha empezado el partido nervioso, al verse por detrás en el marcador nada más empezar por el gol eléctrico de Iñaki Williams. Y después de la diana, por si fuera poco, ha llegado el toque mágico, para despertar la sonrisa de Messi, que después de celebrar con los compañeros el 1-2 ha vuelto a acercarse a Pedri, para facilitarle por segunda vez.
Y el festival del paje Pedri ha seguido tras el descanso. Con Messi como maestro de ceremonias, con otro gol y dos lanzamientos al poste, el canario ha sido su mejor acompañante. Se han buscado, y encontrado, constantemente, para relajar los ánimos de un Athletic que no ha bajado los brazos hasta el 1-3. De hecho, el segundo encuentro de Messi con la madera ha llegado, como no, tras un pase de Pedri, que anteriormente había pinchado un pase en largo con una clase solo al alcance de los elegidos.
Griezmann ha dado la asistencia del 1-3, obra de Messi / EFE
Griezmann, mejora notable, pero sin gol
La única novedad que esta noche ha presentado Koeman respecto al partido contra el Huesca ha sido el cambio de referente ofensivo, Griezmann por Braithwaite. Y el delantero francés ha respondido notablemente, participando mucho del juego y encontrándose con sus compañeros de ataque. En el primer tiempo, el 7 blaugrana ha errado un mano a mano con Unai, un fallo que ha quedado en nada, pues la acción ha sido anulada por un fuera de juego muy justo.
Ya en la segunda parte, Griezmann ha seguido muy activo, pero de nuevo ha estado negado de cara al gol. Su mejor ocasión ha sido un intento de volea tras un centro a media altura en la que la pelota ha salido mordida.
Foto principal: Pedri y Messi, tras el gol del argentino, una acción que inicia el canario con un pase impresionante / EFE