José Mourinho es un showman, un espectáculo cada día. Y seas fan o detractor suyo, no te puedes quedar nunca indiferente con la pasión que tiene por su profesión. Esta tarde jugaba en su estadio contra el particular eterno rival: Tottenham Hotspur contra Manchester City, es decir, Mourinho contra Pep Guardiola. Y nuevamente ha protagonizado una cómica escena marca de la casa.

Y el show de Mou ha llegado en la primera mitad después de un penalti en contra que ha parado el portero del Tottenham. Mourinho ha ido aliviado hacia el banquillo, pero después de una caída de Sterling dentro del área, justo después de fallar la pena máxima, el portugués ha enloquecido. Ha reclamado piscina y tarjeta amarilla, que hubiera sido la segunda y la expulsión del delantero de Guardiola.

Mourinho, ha bajado las revoluciones y después ha sonreído por la victoria final. Pero esta locura de Mou no tenía sentido, como ya es habitual en él, era un claro segundo penalti por una falta dentro del área del portero Lloris sobre Sterling.