Colombia se mantiene en estado de alarma después del ataque a tiros contra el candidato presidencial Miguel Uribe, que ha tenido lugar en medio de un acto público en el parque del barrio Modelia, en la localidad de Fontibón, en el oeste de Bogotá. Según fuentes oficiales, Uribe —también senador— ha recibido tres impactos de bala, dos de los cuales en la cabeza y uno en la pierna izquierda. El episodio ha sido grabado por varias cámaras de seguridad y por ciudadanos que se encontraban en la zona. En algunas de las imágenes se puede observar uno de los presuntos autores, un adolescente, huyendo del lugar de los hechos. Las autoridades lo han capturado poco después, herido de una pierna. Aunque varios testigos apuntan a la implicación de otras personas, por ahora solo se ha confirmado la detención del menor.

 

De manera extraoficial, se ha identificado al presunto sicario como Juan Sebastián Rodríguez Casallas, un adolescente de 15 años que, según las primeras informaciones, vive con una tía en el barrio de Engativá, en la capital colombiana. Su padre, según estas mismas fuentes recogidas por la prensa local, vive en Polonia. Después de la operación policial, el menor ha sido trasladado herido a la Clínica Colombia, donde permanece ingresado bajo custodia policial y acompañado por un tío. En el momento de su detención, se le ha confiscado la pistola de nueve milímetros con la que presuntamente habría perpetrado el ataque contra el senador. Asimismo, de acuerdo con las últimas revelaciones, Rodríguez Casallas estaría vinculado con la Primera Línea, un colectivo presente en las protestas sociales que ha mantenido fuertes enfrentamientos con las fuerzas de seguridad del país.

Por su parte, la cadena de televisión Caracol ha revelado una conversación entre el presunto sicario y un supuesto cómplice que permitiría reconstruir la planificación inmediata del ataque contra Uribe. En uno de los mensajes atribuidos al menor detenido se puede leer: "Lo cobraremos, pero temprano", mientras que el otro interlocutor presiona para actuar sin demora: "Tiene que ser hoy sí o sí (...) No hermano, hoy a la hora que sea". Todo apunta que dos individuos fueron los encargados de ejecutar el atentado, y que se desplazaron en motocicleta hasta el escenario del crimen. Sin embargo, sorprende que no tuvieran ningún plan de huida establecido, tal como se intuye de otro mensaje: "Cogemos un bus mejor (...) Por algún lado donde nos subimos en un bus".

Según la cronología de los hechos recogida por las autoridades y medios locales, el ataque contra Uribe se produjo aproximadamente a las 17:30 hora local de este sábado, mientras encabezaba un acto de campaña en el barrio Modelia. En aquel momento, el senador se encontraba de espalda al público cuando el presunto atacante abrió fuego al menos seis veces, causando heridas graves a Uribe y a dos personas más presentes. Imágenes obtenidas por Infobae Colombia muestran los instantes inmediatos después del tiroteo, dónde se puede observar a un joven corriendo por las calles próximas en un intento de huir. No obstante, tanto participantes como fuerzas de seguridad reaccionaron con rapidez y consiguieron reducirlo disparándole en la pierna.

La Fiscalía General ha anunciado que ha puesto en marcha una estrategia especial para investigar el ataque contra Uribe, centrada en cuatro líneas de actuación prioritarias. Según ha detallado, se han abierto dos investigaciones criminales en coordinación con la Policía Nacional con el fin de identificar tanto a los autores materiales como a los intelectuales del crimen y poder llevarlos ante la justicia. El organismo investigador ha señalado que su principal prioridad es recoger toda la información posible y asegurar pruebas físicas sólidas que permitan reconstruir los hechos con precisión, establecer la verdad y garantizar que los responsables, sea cual sea su grado de implicación, sean judicializados conforme al derecho. Además, el ministro de Defensa de Colombia, Pedro Sánchez Suárez, ha ofrecido una recompensa de 3.000 millones de pesos (unos 729.000 dólares) por información que permita la captura de los responsables del atentado.