La presión no afecta a Max Verstappen. El neerlandés corría en su casa, pero ha atravesado la línea de meta en la primera posición para hacer un nuevo paso hacia el título de Fórmula 1 en el GP de los Países Bajos. Décima vez que suena el himno del vigente campeón del mundo en la presente temporada y ya parece la banda sonora de este curso.

El segundo peldaño más alto del podio sería para George Russell, y el tercero, para Charles Leclerc para representar a una escudería que ha vuelto a quedar marcada por un error imperdonable. Ferrari, una vez más, ha condenado a Carlos Sainz lejos de las posiciones que se atribuyen a su alcance.

Carlos Sainz no puede aspirar a más

Fernando Alonso ya salió escaldado de factores ajenos a su pilotaje durante la jornada de calificación del sábado. El de Oviedo no pudo aspirar a nada más que la decimotercera posición por culpa de un Red Bull que le estorbó mientras trataba de marcar tiempo para calificar para la Q3. Alonso, partiendo desde la apagada de los semáforos con las gomas duras, se ha remitido a la estrategia para tratar de escalar posiciones y lo ha conseguido. De la decimotercera inicial a la sexta posición final para confirmar, nuevamente, una gran jornada dominical para el español de Alpine. Gran salida, gran estrategia, y, por ende, resultado espléndido.

No tendría la misma suerte Carlos Sainz, cuyo fin de semana ha tenido un desenlace contrario al de Fernando. El madrileño alcanzaría la tercera posición en la calificación, pero el transcurso de la carrera enviaría al garete el mérito de su mejor vuelta del sábado. Primeramente, sería víctima de una nefasta parada en boxes que le haría permanecer hasta 12 segundos parado. Y no porque se atascara ningún neumático, sino porque, inexplicablemente, Ferrari no tendría preparadas las gomas de recambio para el coche del '55'.

Si los errores ya no son de conducción, sino que son mecánicos — para calificar de alguna manera el lamentable acontecimiento que ha afectado a la carrera del madrileño — se llega a la conclusión que Carlos Sainz no da para más. De añadida, y ya para acabar de redondear un nuevo fin de semana para olvidar, ha recibido una sanción por un unsafe release que lo ha condenado a la octava posición final.

La Fórmula 1 llega a la casa de Ferrari en el peor momento

Verstappen sigue imparable y el calendario de la Fórmula 1 proporciona una cita siempre marcada para el equipo Ferrari. El GP de Monza será el próximo compromiso de los 20 protagonistas de las cuatro ruedas. Casa de los ferraristas, pero llega en el peor momento. La diferencia entre Sergio Pérez, segundo, a 109 puntos de Verstappen a la clasificación del Mundial, pone en evidencia que esto ya está decidido. Salvo hecatombe, ninguna probabilidad para cualquier piloto y mucho menos para Carlos Sainz, que ve cómo llueve sobre mojado para él y no por su culpa.