El Real Madrid ha llegado a su tercera final de Champions League de manera consecutiva y la cuarta en cinco años. Los blancos pasan nuevamente ronda contra el Bayern de Munich, pero una nueva temporada con polémica. El árbitro turco Cüneyt Çakir no quiso ver un clarísimo penalti de Marcelo que hubiera cambiado completamente la eliminatoria.

El lateral del Madrid Marcelo confirmó después del partido que el posible penalti antes de la media parte por manos dentro del área era uno penalti como una casa: "Es mano, me da en la mano y es penalti. Si digo que no me da estoy mintiendo, pero el fútbol es así". Unas palabras que no hacen más que confirmar que el penalti podría haber dejado un 1-2 al descanso que hubiera puesto contra las cuerdas al Madrid.

Una temporada más los blancos se benefician de un más que polémico arbitraje a favor en el Santiago Bernabéu. "Yo no hablo de los árbitros pero está claro que a veces se equivoca a nuestro favor y otras veces en contra, pase lo que pase hay que jugar a fútbol", seguía diciendo un Marcelo feliz por llegar a una nueva final de Champions.

Y es que el conjunto madrileño ha vuelto a tener de su lado a un arbitraje que los vuelve a beneficiar. 'Algunas veces se equivocan a favor nuestro y de otros en contra', correcto, pero en la Champions casi siempre es a favor. Habrá que ver qué importancia tiene el arbitraje en la final.