La relación entre Ronald Koeman y el FC Barcelona ha llegado ya a una situación de no retorno. La negativa del entrenador de negarse a contestar las preguntas de la prensa en la previa el partido contra el Cádiz, en una comparecencia en la cual se limitó, y sin avisar, a leer un comunicado, ha sido la gota que ha colmado la paciencia de Joan Laporta, hasta el punto que varias personas de dentro del club ya creen que lo único que está haciendo Koeman es forzar la situación para adelantar su despido. Cobrar el finiquito y empezar un nuevo proyecto lejos del Camp Nou.
El entrenador, además, empieza a ver fantasmas por todos los sitios. Gente de su entorno, por ejemplo, afirma que la pancarta que apareció durante el Barça-Bayern, en la que se leía "Koeman fuera" se puso con el beneplácito del club, además de acusar a Laporta de no hacer ninguna mención al entrenador en los diferentes vídeos que ha ido colgando los últimos días en Twitter, en los que pide apoyo para los jugadores, pero nunca menciona al entrenador.
La relación entre Laporta y Koeman se ha ido deteriorando / FC Barcelona
El vestuario se empieza a cansar
Y la creciente desconfianza no termina aquí, pues Koeman ya desconfía incluso del vestuario, pues cree que hay jugadores que le han puesto la cruz, sobre todo por su excelente relación con Laporta. Estos jugadores, sabiendo que al entrenador le quedan pocos días en el banquillo, habrían mostrado sus dudas al ser cuestionados por el presidente.
Según algunas voces, los jugadores serían Jordi Alba y Gerard Piqué, dos personas que mantienen una gran relación con Laporta. Admiran a Koeman por lo que hizo como jugador, pero empiezan a estar perdidos con sus cambios tácticos y con su enfado permanente. A ellos se habría añadido recientemente Sergi Roberto, que sigue apurando sus opciones de renovar su contrato. El de Reus, que cuenta con la confianza de Koeman, no digirió bien que el entrenador le pusiera de lateral derecho en el partido contra el Bayern de Múnich, el partido que supuso un antes y un después en la relación entre Laporta y Koeman. Su actuación, muy mala, acabó provocando que parte de las iras del público se giraran en su contra.
Sergi Roberto terminó muy afectado tras el Barça-Bayern de la Champions / Europa Press
La confianza va decayendo
Al otro lado de la balanza aparecen otros jugadores que no quieren ni oír a hablar de la salida de Koeman. Son, por motivos obvios, los 3 neerlandeses (Frenkie de Jong, Depay y Luuk de Jong), a los que se añaden jugadores como Dest, Mingueza o Coutinho, que ven como la confianza que tienen del actual entrenador podría decaer con cualquier cambio.
De momento, el vestuario se mantiene a la expectativa, consciente de que cualquier mala imagen más puede acabar siendo el detonante definitivo.
Imagen principal: Ronald Koeman, en un partido de esta temporada / EFE