Jordi Alba es uno de los futbolistas del Barça más temibles, que esta vez ha vuelto a hacer daño a la Real Sociedad con su fútbol. Incisivo desde la banda izquierda y profundo en nuevo partido en el Camp Nou. Pero todo el mundo sabe que es un jugador que sabe mantener muy bien la posición dentro del campo hasta que se le cruzan los cables. Y precisamente ha pasado esto esta vez. Dentro y fuera el césped.

En el minuto 95 el lateral del Barça ha subido al ataque a la desesperada, con Reial descolocada y ya sin opciones de empatar el partido. Y Jordi Alba ha completado una jugada de Ansu Fati y Messi para marcar el segundo gol del partido. Era la última jugada y el lateral de l'Hospitalet ha sentenciado. Pero el motivo de la polémica ha sido por su celebración: dedos en las orejas y haciendo ver que no quiere ni escuchar a los culés.

El gol, que finalmente no ha subido al marcador por un fuera de juego previo, no ha podido esconder una celebración fuera de lugar y que ha acabo con Alba encarado con los culés. El lateral catalán, en el postpartido, ha criticado la actitud de los aficionados del Barça: "A nadie le gusta que el público vaya en contra nuestra. Respeto a todo el mundo. Pero también me tienen que respetar a mí. No me gusta que silben en el minuto 15 con empate a cero".

Y así, rabiado por los pitos del Camp Nou a los jugadores, ha reaccionado Jordi Alba. Las formas no han sido las mejores y seguro que este gesto y estas palabras del lateral no acabarán haciendo cambiar de opinión a los aficionados culés, que se han vuelto a marchar del estadio decepcionados por el juego de su equipo a pesar de la victoria.