Joan Laporta tiene un problema grave en el FC Barcelona. Una patata caliente que deberá resolver antes de que le explote en la cara. Y es que en la entidad blaugrana hacen bandera de los valores del conjunto catalán, del que dicen que es mucho "más que un club".
Sin embargo, hay unos de sus jugadores que parece no haber captado el concepto, de que el Barça es mucho más que una institución deportiva. La directiva es consciente que el fútbol trasciende más allá de lo que es un simple deporte y que sus jugadores tienen que ser un ejemplo.

En el Barça hay que dar ejemplo
Por esa misma razón, no se pueden permitir el lujo de pasar de largo cuando se producen actos de indisciplina. Ya sean dentro del equipo, o fuera, pues un futbolista del Barça, siempre representará a la institución, por lo que, a pesar de ser personas normales, siempre tienen que andar con mil ojos para no cometer actos que puedan perjudicar a la imagen del club.
Fue lo que le pasó a Lamine Yamal, una de las últimas perlas de la Masía. Al delantero, de 15 años, se le presupone un gran futuro por delante, pero de un tiempo a esta parte su vida extradeportiva ha generado cierta inquietud en los despachos del Camp Nou.

Primero, fue expulsado de la selección española sub-17, por un acto de indisciplina, junto a un futbolista del Real Madrid y otro del Atlético de Madrid. Los 3 fueron sancionados por sus equipos, en un acuerdo con la Real Federación Española.
Lamine Yamal, vuelve a los entrenamientos
Pero, por lo que parece, su entorno tampoco ayuda. El joven jugador ha cambiado de agente, ahora lo representa Jorge Mendes, y le está llenando la cabeza de pajaritos, cuando todavía no es nadie en el fútbol profesional. En el Barça preocupa que su popularidad se le suba a la cabeza y acabe yendo por el mal camino.

Tras la sanción aplicada a Lamine Yamal, cuatro partidos de suspensión, ha vuelto a los entrenamientos con el primer equipo. Fue la gran novedad sobre el césped a las órdenes de Xavi Hernández, junto a los juveniles Alarcón y Garrido.
Laporta, consciente de que el delantero es el futuro del club, algunos ya lo comparan con Leo Messi, estará muy encima de él. No quiere que se eche a perder un futbolista de su talla, por estar mal aconsejado y por una conducta inapropiada para un personaje público. Deberá hablar con él y hacerle entender que, por muy bueno que sea, si sigue por ese camino, se le acabará el chollo.