Barça e Inter de Milán se enfrentan este martes en la tercera jornada de la fase de grupos de la Champions. El partido será clave, pues todo apunta a que ambos equipos se disputarán la segunda posición del grupo, la que da acceso a los octavos de final de la Champions League. El duelo, además, es una excelente oportunidad para que ambos clubes reanuden las conversaciones que mantuvieron este verano y que terminaron con el acuerdo para la cesión de Jordi Alba al conjunto italiano. El lateral, sin embargo, se negó a irse del Camp Nou, provocando una crisis dentro del vestuario.
Poco a poco, sin embargo, Jordi Alba está viendo que Xavi Hernández no mintió cuando le comunicó que esta temporada iba a jugar poco. Alejandro Balde le ha quitado el puesto, con el añadido de que Xavi cuenta con Marcos Alonso como segundo jugador para ser el carril izquierdo.
Alba sigue en el radar del Inter
Es por ello que el Barça espera que Jordi Alba recapacite y acepte irse al Inter de Milán, donde sería titular indiscutible. El nombre del lateral de L'Hospitalet de Llobregat volverá a estar encima de la mesa, pues el conjunto italiano sigue muy interesado en disponer de Alba en calidad de cedido. El Inter le pagaría una parte muy importante de la ficha, lo que aligeraría mucho la masa salarial del Barça que sigue disparada.
Después del primer encontronazo entre el Barça y Jordi Alba, que llegó a mostrar su enfado en una comparecencia de prensa en un acto publicitario, las disputas entre ambas partes se han ido limando, sobre todo porque el jugador ya está viendo que su posición en la plantilla ha bajado muchos peldaños. El Barça espera que reflexione y que acepte la nueva situación.
El Barça preguntará por varios jugadores
Jordi Alba no es el único nombre que estará encima de la mesa en la comida institucional entre el Barça y el Inter de Milán. Y es que el conjunto blaugrana tiene en su agenda a varios jugadores del conjunto italiano, que al atravesar una crisis económica importante no está cerrado a traspasar a alguna de sus piezas. El nombre estrella es Skriniar, aunque en el caso del eslovaco la situación ha cambiado, pues al terminar contrato el Inter ha perdido opción de ingresar dinero por su traspaso. Está intentando renovar al central, aunque todo parece indicar a que Skriniar ya ha decidido cambiar de aires.
Los otros nombres que gustan son Denzel Dumfries, por el que el Inter de Milán ha pagado 14 millones de euros al PSV, y Lautaro Martínez, que al haber renovado hasta el 2026 parece difícil que vaya a poder salir de Milán. La joya de la corona, sin embargo, es Nicolo Barella, un centrocampista extraordinario que está en la agenda de media Europa. Con un valor de mercado de 70 millones de euros, el Inter lo tiene como comodín. No lo quiere vender, pero si la situación económica no mejora, se verá obligado a traspasarlo al mejor postor.