Pasan las semanas y el Real Madrid sigue viviendo en un mundo que casi todo le es favorable. Sobre todo cuando se habla de los arbitrajes, que más que habitualmente van a su favor. Ahora ha tocado sentir la indignación en la Champions League, pero las polémicas decisiones de los árbitros no han podido evitar la derrota merengue contra el Liverpool.

Un penalti no pitado contra el Real Madrid

El Real Madrid suele ser un club que juega con uno más si se quiere entender que tiene ayudas arbitrales constantes. Ha quedado demostrado en la Liga que en las últimas jornadas siempre ha tenido alguna ayuda, o decisión arbitral favorable, que le ha dado la victoria o alas para conseguirla. Y para continuar con la misma tónica, nada ha cambiado en la Champions.

El árbitro Mateu Busquets Ferrer pitando un partido en LaLiga / Foto: Europa Press

Aun con el marcador de 0-0, un chute de Dominik Szoboszlai acabó topando con la mano de Aurélien Tchouaméni. La imagen deja muchas dudas sobre si es dentro o fuera del área, ya que está al límite de la línea de la frontal. Sin embargo, la decisión de primeras del árbitro rumano István Kovács fue la de señalarlo fuera del área. Y el aviso del VAR, que lo corrigió, no acabó afectando. La decisión final fue la del no-penalti.

Mirando las repeticiones, queda claro que en la Liga se habría pitado sin problemas el penalti. Y en más de una ocasión similar con rivales del Real Madrid se han acabado señalando las penas máximas. Ahora bien, cuando hablamos de que la víctima es el club merengue, la cosa cambia. También es cierto que el arbitraje europeo es más permisivo y que estos penaltis no se acostumbran a pitar.

Dos reclamaciones sin premio en la Champions League

Pero es que la cosa no acaba aquí, ya que, por suerte, el arbitraje europeo no está tan condicionado como el español. El Real Madrid reclamó un penalti de Robertson sobre Arda Güler, pero la realidad es que no había nada. El escocés le quita la pelota al turco con limpieza, y el contacto posterior no tiene que ser sinónimo de penalti.

Y, como era de esperar, Vinícius también fue protagonista por una nueva actuación teatral digna de un Oscar. Bradley, defensa del Liverpool, golpea levemente el rostro del brasileño en una acción defensiva dentro del área inglesa. Es un gesto natural y acaba contactando cuando Vinícius ya estaba cayendo al suelo. La comedia posterior con las manos en la cara del brasileño y la simulación de una grave agresión ya es algo de estudio. Por suerte, el árbitro rumano no picó.

Por lo tanto, cosa extraña, el Real Madrid no se salió con la suya. A pesar de la picaresca y el hecho de jugar al límite, esta vez la pelota cayó del lado de la justicia. Y el gol de Alexis Mac Allister que dio la victoria al Liverpool hizo aún más justo este duelo de la Champions League, donde el arbitraje parece más serio que el que vemos cada fin de semana en España.