Cuando ya se ha disputado más de media temporada, dentro del Real Madrid no están del todo satisfechos con los resultados obtenidos hasta ahora. El conjunto que entrena Carlo Ancelotti dio un paso de gigante en la Champions League para poder acceder a la siguiente ronda, pero en el resto de competiciones, los madrileños no están cumpliendo con las expectativas. Ahora mismo, los blancos están a siete puntos del Barça en la Liga y, tendrán que remontar en el Camp Nou si quieren jugar la final de la Copa del Rey.
La competitividad en un club como el Madrid es máxima y Florentino Pérez quiere pulir todos los detalles a la perfección. Es por eso que los últimos malos resultados han señalado a algunos futbolistas. Aunque no ha tenido demasiado protagonismo en las últimas semanas, el rendimiento de Aurélien Tchouaméni había sido mucho más flojo después del Mundial de Qatar, hasta el punto que otros jugadores, como Eduardo Camavinga, le estaban robando la titularidad.
Las suplencias de Tchouaméni generan tensión
A pesar de estar recuperado y listo para disputar el Clásico de las semifinales de la Copa del Rey, Ancelotti decidió que Tchouaméni empezaría el partido desde el banquillo, y no entraría hasta el último cuarto de hora de juego. Eso, puede parecer solo que el técnico italiano no quiere tomar riesgos y proteger al futbolista, que vuelve de una lesión, pero desde el palco no les acabó de gustar esta decisión de Carletto.
Según una información del portal Defensa Central, la suplencia de Tchouaméni contra el Barça genera dudas a la directiva, encabezada por Florentino Pérez, ya que cree que el mediocentro francés se fichó para este tipo de enfrentamientos de alto riesgo. Por este motivo, hay preocupación sobre el caso y, según la citada fuente, Ancelotti todavía no ve al 100% a Tchouaméni para que sea titular indiscutible en el Real Madrid y, por lo tanto, el francés se tendrá que ganar el sitio.
Camavinga da un paso adelante
La tarea de sustituir a las mil maravillas a Casemiro era muy y muy complicada. El brasileño dejó un agujero enorme en el centro del campo del Madrid, pero Florentino Pérez llegó a un acuerdo con el Mónaco para fichar a Aurélien Tchouaméni por 80 millones fijos más 20 en variables. El francés no se esperaba que tendría tantas oportunidades desde el inicio, pero después del Mundial, su rendimiento ha caído en picado.
Poco a poco, Eduardo Camavinga, compañero suyo en la selección francesa, está ganando protagonismo para ocupar esta posición de pivote con los madridistas y, en un partido importante como el de Copa contra el Barça, Ancelotti decidió que quien empezaría de inicio sería, precisamente Camavinga. Queda mucha temporada y Tchouaméni tendrá que dar un paso adelante si quiere hacer historia en el Santiago Bernabéu.