Hansi Flick no ha necesitado muchos días para lanzar un mensaje claro desde los primeros entrenamientos de la pretemporada: el Barça no necesita fichar tanto si mira dentro de casa. Y es que el técnico alemán está entusiasmado con el rendimiento de Jan Virgili, uno de los canteranos que más está brillando en este arranque de curso.
Virgili, extremo de gran talento y verticalidad, está confirmando en estos primeros días de trabajo por qué en la cantera del Barça muchos le consideran una de las grandes joyas de La Masia. Rápido, inteligente en los movimientos, con desborde y gol, está llamando la atención no solo del cuerpo técnico, sino también del vestuario, donde los pesos pesados lo han acogido con admiración.
Una alternativa real para el primer equipo
El mensaje de Flick ha sido directo: el fichaje ya lo tenemos en casa. Y lo dice convencido. El alemán ha quedado gratamente sorprendido por la madurez con la que se ha integrado Jan Virgili al trabajo del primer equipo. Le ve preparado para competir y no solo como una solución de emergencia, sino como una alternativa real para el extremo izquierdo, posición en la que el Barça está buscando opciones en el mercado.
Virgili se ha ganado su billete para la gira asiática, donde tendrá una oportunidad de oro para ganarse un hueco en la plantilla definitiva. Flick quiere observarlo en contexto competitivo de primer nivel, enfrentándose a rivales exigentes y demostrando que puede mantener su nivel más allá de los entrenamientos.
Un perfil muy del estilo Barça
Lo que más ha cautivado a Flick es el perfil futbolístico de Virgili, muy adecuado para el juego que quiere implantar: rápido, técnico, trabajador en defensa y con gran capacidad de asociación.
Aunque el club sigue atento al mercado, sobre todo con los casos de Luis Díaz o Rafael Leao, la irrupción de Virgili podría suponer un giro en la planificación, sobre todo si logra convencer durante la gira. En un contexto de restricciones económicas, tener a un canterano con tanto potencial listo para aportar puede ser una bendición para el Barça de Flick.
Lo que está claro es que Jan Virgili ha llegado para quedarse. Ahora, le toca a él aprovechar la oportunidad. El míster ya ha avisado: si sigue así, tendrá minutos. Y eso, viniendo de Flick, no es poca cosa.