Parte de los seguidores del Espanyol presentes el pasado sábado en el estadio de Montilivi, para el partido de su equipo contra el Girona, se mofaron de Ana Frank vistiéndola con la camiseta del Barça. Un acto impropio de una afición que no tendría que admitir a radicales.

Los hechos no hacen más que vincular una muerte por culpa del nazismo y un club rival como es el Barça. El acto se ha producido durante un duelo contra el Girona, el otro equipo catalán de Primera División, colgando una imagen de Frank en la zona donde se situó la afición blanquiazul, que además fue precedido de un insulto racista del delegado del Espanyol.

Esta sancionable imagen recuerda actuaciones del pasado octubre del 2017 por parte de la afición italiana de la Lazio durante un partido contra el Cagliari. Entonces los hooligans de la Lazio inundaron el estadio que comparten con los rivales de la Roma con la misma imagen de Anna Frank, que esta vez han utilizado los aficionados del Espanyol, con la camiseta del Roma.

Aquellos hechos tuvieron una gran repercusión en la sociedad italiana, con quejas de la comunidad judía y de la sociedad en general, y que acabó con una sanción económica para el club por los insultos antisemitas de parte de sus seguidores radicales. Pero este hecho en Girona se espera que no quede apartado y que haya una investigación.

Una imagen que sale a la luz junto con los insultos y las imágenes provocativas que han aparecido en las últimas horas por parte de estos mismos seguidores del Espanyol.

Estos últimos hechos en Montilivi, iniciados con el insulto racista del delegado del equipo, ya han hecho reaccionar a la Penya Juvenil 1991, que ha pedido explicaciones al club.