Carlos Rodríguez, ciclista granadino de solo 22 años del equipo Ineos, ha sido el protagonista inesperado de una de las etapas más esperadas del Tour de Francia, una jornada con 5 puertos de montaña en la que todos los ojos estaban puestos en Vingegaard y Pogacar, los dos grandes favoritos al título. El esloveno lo ha intentado de todas las maneras posibles, pero no ha podido sorprender a un Vingegaard que se ha llevado la bonificación al coronar el Joux Planes, aunque el esloveno ha respondido ganándole el esprint en la meta.

Y mientras todos miraban a las dos estrellas, Carlos Rodríguez, ahora ya 3º en la general en su primera participación en el Tour, ha atrapado a los dos líderes y, sabiendo que ni Pogacar ni Vingegaard iban a jugársela en la bajada, ha atacado, logrando una distancia suficiente para imponerse en la meta.

Jumbo-Emirates, un duelo precioso

La etapa no ha empezado nada bien, ya que a los pocos kilómetros se ha producido una caída multitudinaria, con más de 30 ciclistas implicados. 3 de ellos, el catalán Antonio Pedrero y el francés Louis Meintjes y el colombiano Esteban Chaves, se han tenido que retirar. La carrera se ha relanzado 20 minutos después. Empezaba el espectáculo. Y es que Jumbo, el equipo de Vingegaard, no ha tardado en coger la batuta del pelotón, marcando un ritmo muy fuerte que ha ido rompiendo el pelotón.

A falta de 2 puertos para el final de la etapa, el grupo ya se había reducido a solo 40 corredores, y con el paso de los kilómetros han ido cayendo más, quedando solo los elegidos. Al llegar a los pies del puerto del Joux Planes, parecía que todo seguiría igual, pero el UAE Team Emirates, el equipo de Pogacar, tenía un plan. Majka se ha puesto en cabeza y ha impuesto un ritmo durísimo, rompiendo por completo el grupo, ya que ambos favoritos se han quedado con un solo gregario a su disposición.

Pogacar no sorprende a Vingegaard y Carlos Rodríguez se luce

Tras el ataque de Majka, Wout van Aert ha vuelto a coger la batuta, con Vingegaard a rueda, pero todo ha cambiado a 5 kilómetros de la cima, justo cuando empezaban las rampas más duras. Pogacar le ha hecho un gesto a Adam Yates, que ha atacado, quedándose con solo Pogacar y Vingegaard a rueda. Y el esloveno solo ha tardado un kilómetro en probar el estado físico de Vingegaard, con el primer ataque, siempre explosivo cuando se trata de Pogacar. El danés se ha descolgado, pero poco a poco ha ido volviendo a acercarse, quedándose a 4 segundos. Vingegaard, consciente de que el primero en coronar el puerto se llevaba 8 segundo de bonificación, se ha exprimido hasta volver a juntarse con Pogacar.

Los dos últimos kilómetros de ascenso han sido apasionantes, con los 2 mejores ciclistas del mundo juntos, controlándose, midiendo las fuerzas, y prácticamente empatados en la clasificación general. A medio kilómetro del final del puerto, Pogacar ha atacado, sin éxito, y el danés ha reaccionado con otro ataque, en su caso bueno, ya que se ha llevado la bonificación, 3 segundos más de diferencia para la general. En la bajada, ninguno de los dos ha atacado, ya que no había opción a lograr ventajas, lo que ha aprovechado Carlos Rodríguez para atacar, para entrar en la historia del Tour. "El esfuerzo ha merecido la pena. Al principio, las sensaciones no han sido buenas y he sufrido un pinchazo, pero me he ido encontrando mejor hasta el final", ha afirmado el granadino al terminar la etapa. El Tour ya está en los Alpes y este domingo toca otra etapa espectacular. Vingegaard le saca 10 segundos a Pogacar.