El Clásico del fútbol argentino elevado a su máxima expresión. Mientras Europa todavía espera una final de la Champions entre Barça y Madrid, América del Sur ya tiene su partido para la historia. Esta madrugada, Boca Juniors ha certificado su clasificación para la final de la Copa Libertadores después de empatar (2-2) contra el Palmeiras brasileño y se enforntará a su gran rival, River Plate, en los dos últimos partidos de la competición.

La primera piedra la puso este martes el conjunto 'milionario' después de imponerse a Gremio en el Monumental de River (2-1), remontando así la eliminatoria contra los de Porto Alegre.

En aquel momento las expectativas del fútbol argentino pasaron a ser más altas que nunca, y es que Boca Juniors había ganado el primer partido de la eliminatoria (2-0) contra el Palmeiras, y por lo tanto lo tenía todo de cara para llegar a la gran cita. Así ha sido. Los argentinos han hecho valer su ventaja y después de empatar a dos con goles de Ramón Ábila y Darío Benedetto, también han superado las semifinales.


Los dos clubs más populares de argentino se verán las caras en una cita histórica con ida y vuelta que se disputará íntegramente en Buenos Aires. Por primera vez desde su creación, la final Copa Libertadores la disputarán dos equipos de la misma ciudad.

El primer Clásico se disputará en la Bombonera de Boca, mientras que el segundo tendrá lugar en el Monumental de River. También será la primera ocasión en que dos equipos argentinos se enfrentan en la final de la máxima competición continental y la tercera en que la disputan dos clubs del mismo país.

El ganador, posible rival del Real Madrid

Quién se lleve la final tendrá doble premio. Primero, porque hundirá su eterno rival, y segundo, porque podrá disputar el Mundial de Clubs de Abu Dabi que tendrá lugar este mes de diciembre. Si el ganador de la Libertadores hace los deberes y supera su parte del cuadro, en la final probablemente se encontrará un Real Madrid que previamente sólo habrá tenido que superar el Chivas de Guadalajara.