El Atlético de Madrid no es el Barça. Después de una temporada más que discreta de los culés y del Real Madrid, los colchoneros han batallado durante todas estas jornadas para soñar con la Liga y ahora está más cerca que nunca. El Atlético no ha fallado este miércoles y se ha impuesto con sufrimiento a la Real Sociedad por 2-1. El líder sigue más líder y sólo quedan dos combates ya.

Partido a partido... y hacia al título

Con el discurso siempre humilde, y de ir partido a partido, los del Cholo Simeone están a punto de conseguir el valioso título del campeonato doméstico. Con las palabras siempre presentes que el objetivo es quedar tercero, por debajo de Barça y Madrid, los colchoneros han sido los que más tiempo han sido líderes.

Wanda Metropolitano Atletico de Madrid EFE

Carrasco aplaudiendo / EFE

El trabajo todavía no está acabado, están a cuatro puntos de distancia del Barça y a cinco del Madrid (los blancos con un partido menos). En cualquier caso, toda la ambición que le ha faltado a los de Koeman las últimas semanas se la ha quedado el Atlético. Han puesto toda la carne en la parrilla y han salido a morder a los de San Sebastián que sólo hacían que recibir llegadas y más llegadas.

Los primeros quince minutos en el Wanda Metropolitano han sido un escándalo ofensivo de los madrileños, sinónimo de las ganas que tenían. Luis Suárez y Llorente han intentado abrir la lata, pero ha sido Yannick Carrasco el responsable de esta tarea. Rabia en la celebración del belga y reivindicación de un equipo que ha sido muy criticado también durante la competición.

Los de Simeone no estaban tranquilos con el 1-0, saben que la Real siempre puede ser peligrosa, y no han parado hasta conseguir el segundo. Asistencia de Suárez y gran definición de Correa. Los de Imanol Alguacil no iban a hacerse pequeños y a resignarse con este marcador. Los vascos han seguido haciendo su juego.

Portu Atletico Real Sociedad EFE

Portu envía la pelota al palo / EFE

El Atlético ha tenido una gran suerte porque la Real lo ha probado de todas las maneras. Isak ha tenido un par de ocasiones clarísimas, pero entonces ha surgido la figura de Oblak, un muro en el Wanda. Cuando no aparecía el portero esloveno eran los palos que le salvaba.

En la segunda mitad, los blanquiazules han sido mejores sobre el césped, se merecían el gol y les ha llegado demasiado tarde. Zubeldia ha recortado diferencias, pero no ha servido de nada porque el resultado final ha sido de 2-1. Con mucho sufrimiento, el Atlético ha conseguido los tres puntos y da un paso importantísimo para conseguir la Liga.

 

Imagen principal: Carrasco celebra el gol / EFE