En este punto del inventario, cuesta encontrar series que realmente te sorprendan. Es culpa de los algoritmos, de la saturación de la oferta y también de la falta de ideas, que ha llevado a los géneros a aferrarse, demasiado a menudo, a las fórmulas tradicionales. Estos últimos días ha sido fácil leer comentarios hiperbólicos a propósito de Pluribus, la nueva creación del autor de Breaking Bad y Better Call Saul, Vince Gilligan. Y seguro que muchos y muchas se lo han tomado con cierta incredulidad, ya que la plataforma Apple TV solo ha estrenado tres de sus nueve episodios. Pero, sin que sirva de precedente, el entusiasmo está más que justificado. Dicho de otra manera, los tres episodios son mejores que la inmensa mayoría de series que se han estrenado este año y buena parte de los anteriores. ¿Qué los hace tan especiales? Pues que, de entrada, cuestan de explicar. Se tienen que ver para entender su magnitud. La serie es, de momento, tan inclasificable, tan diferente del resto, que mientras la miras no paras de hacerte preguntas y dibujar una sonrisa entre cómplice y desconcertado. En este tiempo de titulares por número de caracteres, que no puedas hacer una sinopsis breve de una ficción dice mucho de su singularidad. ¿A qué se puede atribuir? Indiscutiblemente, a Gilligan, el hombre que nos regaló Walter White y Saul Goodman, pero también a la actriz Rhea Seehorn, que solo por las primeras escenas del episodio piloto ya merecería todos los Emmy del mundo.

Serie única

Sin revelar más de lo necesario, se podría decir que Pluribus es como una trama de La dimensión desconocida pasada por el filtro de la sátira política moderna, pero con derivaciones hacia la crónica emocional de estos tiempos de simulacros. Todo comienza con el descubrimiento de una misteriosa señal (¿extraterrestre?) que degenera en una catarsis a escala mundial. El resultado es que el mundo tal como lo hemos conocido hasta ahora se transforma, hasta el punto de que la sociedad se vuelve extrañamente uniforme y desbordante de felicidad. Es así para todos, excepto para once personas repartidas por todo el planeta. Y entre ellas se encuentra Carol, una escritora de Albuquerque que no tiene ninguna intención de dejarse seducir por esta ola de supuesto buen rollo.

Pluribus Apple TV
Una de las protagonistas de la serie 'Pluribus', que puedes encontrar en Apple TV / Foto: Apple TV

Esto puede servir como argumento, pero la verdadera gracia de Pluribus es que nunca sigue los caminos que esperas y que su tono es poco comparable a nada que hayamos visto antes. Hay quien la ha comparado con Severance, pero en realidad lo único en lo que conectan es el afán de romper esquemas. Mientras la miras, ríes, te asustas, te estremeces y te desarma. Pero tienes muy claro que estás viendo una serie única, una genialidad que lo tendría que hacer muy mal para perder el rumbo y que te devuelve una imagen muy nítida, y, por tanto terrorífica, de los tiempos que nos ha tocado vivir.