La escritora Lluïsa Forrellad (Sabadell, 1927), que tras ganar el Premio Nadal en 1953 "desapareció" del mundo literario durante cinco décadas, ha muerto hoy a los 91 años, cinco años después de la muerte de su hermana gemela, la también escritora y dramaturga Francesca Forrellad.

Fuentes próximas a la escritora han confirmado a Efe la muerte de Forrellad y Òmnium Cultural ha publicado un tuit en el que relata que "nos ha dejado Lluïsa Forrellad, autora de grandes obras como Sempre en capella y Foc latent, y dedica "un sentido abrazo a la familia y amigos".

Lluïsa confesó haberse sentido "desbordada" por las expectativas que se crearon en torno a ella después de ganar la Navidad a los 26 años con la obra Sempre en capella.

Se trata de una novela que relata las vicisitudes de dos médicos y un químico durante una epidemia de difteria en la Inglaterra del siglo XIX y que se enmarca en el realismo social propio de la época en que fue escrita.

Silencio literario durante 50 años

Después de obtener este prestigioso galardón, Forrellad decidió mantener un silencio literario que interrumpió en el 2006, cuando ya había cumplido los 78 años, con la publicación de Foc Latent (Angle Editorial).

Durante estos 52 años de supuesta inactividad, la escritora escribió varias novelas y se dedicó, según confesó en una entrevista con Efe, a "vivir la vida". "No se me había dado cuenta de que había pasado tanto tiempo", aseguró entonces.

La novela con la cual volvió al mundo literario narra una historia romántica ambientada en la convulsa Barcelona de finales del siglo XIX, en la cual se mezclan pasiones, secretos y revueltas.

Escritora al margen de las modas, Lluïsa Forrellad dedicó décadas a rehacer y perfeccionar historias que escribió durante sus 50 años de silencio y que tenía mecanografiadas y guardadas en un cajón.